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Los “diarios solidarios” se pusieron de moda cuando la pandemia estaba en lo más y mejor, y la investigación por este caso todavía se mantiene abierta y sigue avanzando, así lo confirmó la Fiscalía.
Aunque la Fiscalía Adjunta de Fraudes y Cibercrimen había dictado medidas cautelares contra los sospechosos, un hombre de apellido Bonilla y una mujer de apellido Monge, ellos a la fecha solo se mantienen al tanto de la investigación pero sin medidas cautelares.
Bonilla Flores y Monge Bolaños son investigados por el delito de estafa menor, contra ellos fueron presentadas más de 1.295 denuncias de familias de un solo grupo a cargo de Verónica Peña, por aparentemente entregarles dinero para que por medio de APAINDES les entregaran un diario. La comida nunca llegó y por eso Peña quien es líder en ayudas a comunidades los denunció.
Los diarios se volvieron un “boom” a finales del 2020, APAINDES ofrecía paquetes de comida valorados en ¢80 mil en solo diez rojitos.
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En cada paquetico había arroz, harina, frijoles, azúcar, café, aceite, achiote, sal, latas de atún, lentejas, sopas instantáneas, macarrones, consomé, salsas de tomate preparadas. También llevaba productos de limpieza como papel higiénico, lavaplatos, pastas de dientes, desinfectante, jabón en polvo y cloro.
Algunos de estos diarios sí llegaron, pero otros solo se volvieron una promesa y algunas personas aseguran que trataron de recuperar el dinero que entregaron pero no fue posible.
Doña Verónica asegura que el caso ha estado igual, que no han sabido nada. Peña confiesa que la gente todos los días le escribe o la llama para preguntarle si sabe algo de la investigación.
“Esto es una cruz”, dijo la mujer, a quien lo ocurrido le genera angustia.
Doña Gloria Vega nos contó que ella fue una de las afectadas y hasta la fecha siente muchísima tristeza de no haber recibido el diario.
“En ese momento, no le puedo explicar lo que nos costó reunir los ¢10 mil, para pedir el diario, en la casa todos estábamos sin trabajo y pasamos días duros, y la gente dice y critica que como se les ocurre pagar por algo así si olía a estafa, pero nosotros conocimos a mucha gente que tenía necesidad igual o más bien menos que nosotros y si recibieron el diario hasta dos veces, pero no hubo una tercera, y para otros como nosotros ni siquiera llegó la primera vez, todo fueron larga”, dijo Vega.
La señora asegura que ella fue varias veces hasta San Gabriel y vive en Alajuelita, hasta pasajes gastó y lo único que escuchó fue “ya casi”.
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El caso se investiga con el expediente 20-001922-0276-PE
En la página oficial de Apaindes ya no hay publicaciones como antes que eran a diario, lo que sí hay son constantes mensajes de personas que aseguran ser afectados.
