Un rasguño en la cara, otro en el dorso de la mano derecha y uno más al lado izquierdo de la espalda, además de un morete en la espalda, todo eso presentó el bailarín nicaragüense Herrera Martínez, luego del descubrimiento del homicidio de la doctora María Luisa Cedeño Quesada.
Esto lo explicó Kenneth Villalobos León, perito forense y especialista en medicina legal del Organismo de Investigación Judicial (OIJ),en el juicio que se desarrolla por el ataque mortal de la anestesióloga.
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Villalobos explicó que Herrera leyó el consentimiento para ser revisado por el médico y luego lo firmó al decir que comprendía.
“Él ingresó por sus propios medios, tenía la cabeza puesta sobre su antebrazo, que tenía sobre la mesa (en el consultorio del médico).
“Firmó con un poco de temblor en sus manos”, recordó el testigo
Villalobos afirmó que Herrera tenía lesiones en la cara, en la mano y en la espalda, que son compatibles de una fricción del borde de la uña sobre la piel.
Agregó que en la espalda tenía un morete rojizo, era tipo lineal y horizontal.
Todas estas lesiones quedaron fotografiadas y fueron entregadas en dictámenes solicitados por el OIJ de Quepos.
Esta inspección la realizó el médico Villalobos frente a dos investigadores del OIJ de Quepos.
Esta fue el 20 de julio del 2020, a partir de las 9:09 de la noche, nueve horas antes habían hallado el cuerpo de María Luisa Cedeño en el hotel La Mansión Inn, en Manuel Antonio Quepos.
El médico Villalobos concluyó en su informe que estas lesiones fueron ocasionadas entre dos horas y 12 horas antes de la revisión, señaló que incluso estos pudieron haber si provocadas durante la madrugada del propio 20 de julio del 2020.
“Las lesiones (aruñazos) tenían cortes inflamatorios, nos hace interpretar que fueron producidas de manera reciente, este rango si es compatible que hayan sido provocadas el 20 de julio del 2020″, detalló el testigo.
Villalobos está especializado en valorar a personas vivas.