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Nelson Sánchez Ureña, alias Sukia, tendrá que pasar 35 años en la cárcel por el atroz homicidio de la joven Allison Bonilla, pues el Tribunal de Apelación de Sentencia de Cartago ratificó el aumento que se hizo en su condena, que inicialmente era de 18 años de prisión.
Así lo dio a conocer el Ministerio Público la tarde de este viernes, indicando que la Fiscalía Adjunta contra el Narcotráfico y Delitos Conexos fue notificada este viernes sobre la decisión del Tribunal, el cual determinó que Sánchez era responsable de un delito de homicidio calificado.
“En un primer juicio, en agosto del 2021, la fiscalía logró demostrar la responsabilidad de Sánchez, quien fue sentenciado a 18 años de prisión por el delito de homicidio simple. Sin embargo, el órgano acusador apeló el fallo, al considerar que los hechos correspondían a un homicidio calificado, conducta cuya pena es más elevada”, indicó la Fiscalía.
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Tras un recurso de apelación presentado por la fiscalía, el Tribunal de Apelación de Sentencia de Cartago ordenó un nuevo juicio, realizado en setiembre del año pasado, en el que únicamente se discutió lo relativo al tipo de delito.
“El Tribunal Penal de Cartago le dio la razón al Ministerio Público y sentenció al acusado a 35 años de prisión por un homicidio calificado. Ese segundo fallo fue apelado por la defensa del imputado”.
Los hechos que terminaron en la condena de Sukia se remontan al 4 de marzo del 2020, cuando la víctima desapareció y no regresó a su casa, en Paraíso de Cartago. Tras las investigaciones, seis meses después se encontró su cuerpo, en Cachí.
