Dos reos costarricenses que tienen el beneficio de usar el brazalete como una alternativa para no estar en la cárcel, se paseaban con toda libertad por Paso Canoas, frontera de Costa Rica con Panamá.
Los policías del Servicio Nacional de Fronteras en la provincia de Chiriquí, al verlos en actitud sospechosa los detuvieron y se los dieron a las autoridades costarricenses.
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Las detenciones fueron por separado. La primera fue el viernes y la segunda el sábado.
Al primero que detuvieron fue a un hombre de apellidos Ortega Herrera de 38 años, quien tenía la tobillera de seguridad en la pierna izquierda por un proceso judicial por los delitos de robo agravado, hurto y agresión con arma de fuego, causa tramitada en la Fiscalía del sector de Pérez Zeledón.
A él le dieron el beneficio el 28 de febrero del 2018 y el año pasado registró 10 irregularidades con la tobillera, así lo afirmó José Luis Bermúdez, director de Adaptación social.
Bermudez agregó que la Defensa Pública pidió el 25 de marzo anterior que revisaran la tobillera pues en apariencia, ese día de la revisaron, se descargaba y desde entonces no volvieron a tener rastro del sujeto, ya que anduvo sin batería.
El segundo detenido es de apellidos Rodríguez Burgos de 42 años, investigado por agresión con arma en la Fiscalía Municipal de Corredores por los delitos de agresión y violencia doméstica con puñal, él no ha sido sentenciado.
El Ministerio de Justicia pidió que le revocaran el beneficio, pero los jueces decidieron que siga con el beneficio.