Al policía Denis Cordero Rojas, de 37 años, le encantaba la playa, pero lo que más lo apasionaba era surfear, por eso siempre aprovechaba sus ratos libres para escaparse a Boca de Barranca, en El Roble de Puntarenas.
En ese lugar, donde pasó tantos buenos momentos junto a su familia y amigos, el oficial perdió la vida a manos de un desalmado que lo agarró a balazos la tarde de este viernes 10 de enero.
Ese día Denis fue a la playa para compartir con varios de sus amigos ya que él no podía surfear debido a que se estaba recuperando de una operación que le habían hecho en el estómago.
Ariel Arguedas, primo de Cordero, contó que el ataque, en apariencia, se dio porque los tres maleantes intentaron asaltar a Denis, pero él no se echó para atrás y los enfrentó.
“Uno no se explica como la delincuencia llega a tanto, estamos seguros que eso fue por asaltarlo ya que él no tenía enemigos y él decía que si algún día lo asaltaban no se iba a dejar”, dijo Arguedas.
El joven dijo que la muerte de Cordero fue un golpe muy duro para él porque siempre fueron muy cercanos, hasta el punto de que se consideraban como hermanos.
"Es muy lamentable lo que ocurrió, la familia está muy dolida por su muerte, Denis era un hombre tranquilo al que le gustaba mucho el surf, solíamos ir mucho a ese sector a surfear juntos. También le gustaba andar en cuadraciclo, incuso tenía uno”, detalló.
Reconocimiento
Además del surf, Denis vivía apasionado por su trabajo como oficial de la Fuerza Pública en la delegación de El Roble.
Cordero ya tenía un extensa trayectoria como defensor de la ley, incluso el pasado 27 de noviembre de 2019 recibió un reconocimiento en el Ministerio de Seguridad Pública por llegar a los 10 años de servicio policial.
Denis era muy querido por sus compañeros de delegación, pues siempre se preocupaba por ellos, incluso sacaba hasta un tiempito para cocinarles de vez en cuando.
"Uno no espera un desenlace así para un compañero, uno trabaja para disminuir la delincuencia y la delincuencia acabó con su vida. Él era un buen compañero, muy callado pero cuando era de sonreír lo hacía con alegría y era muy bueno en la cocina”, recordó el oficial Diego Gatgens.
El policía era vecino de El Roble y vivía junto a sus papás, además era el mayor de tres hermanos. Familiares informaron que Cordero fue velado este sábado y su funeral se realizará este domingo en esa misma comunidad.