EscucharUno de los rescates más complicados, largos y agotadores es lo que ha enfrentado la Cruz Roja en las faldas del volcán Turrialba.
Pese al exitoso rescate aéreo para la turista española de 39 años que sufrió fuertes golpes, las labores no terminan ahí, pues las personas que la acompañaban y demás rescatistas que llegaron por tierra hasta donde ellos estaban deben salir caminando de la zona.
Así lo confirmó Dyanne Marenco, presidenta de la Cruz Roja.
“Habiendo extraído a la paciente todavía nos queda mucho trabajo por realizar, porque nos quedan otras personas que no están lesionadas, pero que estaban acompañandola a ella en el cañón y deben salir por tierra, lo que implica necesariamente horas y horas de trabajo”, afirmó Marenco.
A las 3 a. m. de este lunes entró una patrulla de cruzrojistas caminando por un punto recomendado por vaqueanos, quienes acompañaron a los rescatistas pues contaban con plan B y C en caso de que la extracción con el helicóptero no fuera posible.
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Para este lunes a las 8 a. m. se cumplieron 41 horas de trabajo ininterumpido en la operación de rescate que la iniciaron desde el sábado a la 1 p.m. que dieron la voz de alerta.
Los cruzrojistas y vaqueanos han enfrentado noches heladas con el fin de salvar a estas personas que practicaban de un deporte extremo de nombre de nombre canyoning (barranquismo).
“El cañón y la topografía del terreno, además del tipo de suelo que dificulta los anclajes y hace que sea uno de los rescates más complejos y más técnicos que tengamos registro, se ha hecho gracias al apoyo de una serie de expertos en estos temas, expertos en rescate vertical, pero además de cruzrojistas con un gran corazón, que apesar del frío de la noche y del cansancio no parar de luchar por aliviar el sufrimiento de las personas”.
El personal se mantiene en el sitio.
