Róger Zumbado, conocido como el payaso Ajonjolí, fue a quien le decomisaron los animales exóticos en su casa, en San Antonio de Belén, Heredia.
A Zumbado la Fiscalía de San Joaquín de Flores, Heredia, lo investiga por el delito de comercio, tráfico y trasiego de animales silvestres, fue detenido el viernes 12 de marzo, pero no le interpusieron ninguna medida cautelar porque el juzgado determinó que puede seguir apegado al proceso sin necesidad de medidas.
Ahora él le pide a las autoridades que lo dejen ver a sus animales y además que le devuelvan una cacatúa moluca, de nombre Mango, que la tiene desde hace 22 años.
“Los animales los fui teniendo desde hace mucho tiempo, cuando se podían comprar en veterinarias o fuera del país, en Florida compré una cacatúa moluca desde 1999, ahora temo que se estrese y se pueda morir.
“La tengo hace 22 años y ellas crían un vínculo con el ser humano cuando tienen muchos años de convivir con el cuidador”, aseguró Zumbado.
El hombre, de 56 años, es payaso profesional desde hace 40 años y se dedica a hacer espectáculos de magia con animales para niños en fiestas privadas.
“Ellos eran parte de mi vida, soy soltero, no tengo hijos, la pasión mía eran las fiestas y usar unos animales en los shows.
“Nunca había tenido problemas por mantener mis animales, tengo tres años de estar peleando con el MINAE para que me los inscriban, ellos deben de tener un expediente de registro porque, por ejemplo, tengo facturas de una lapa, tortuga y loras que las compré en centros que eran autorizados, pero la ley cambió cuando ya yo tenía a los animales. ¿Qué hago con los animales, los llevo a dormir o los boto?, por eso es que siempre los he mantenido”, manifestó.
No ha dormido
Zumbado vivía solo con los animales, asegura que las lapas también hacen un vínculo cuando las tienen en casa y siempre las dejaba salir a las 6:30 de la mañana y por las noches las metía en jaulas para que durmieran, por miedo a los mapaches o zorros que podían llegar a la casa.
“No he podido dormir, he llamado al Zooave, donde tienen a Mango y los demás animales, para tratar de que me dejen verlos, solo quiero llevarles la dieta que estoy acostumbrado a darle a Mango, ella come frutas, semillas, vegetales, pero casi todo dado de la mano, a ella no le gusta que le pongan un comedero, la tengo que tener en el brazo o en el hombro.
“Que me devuelvan a Mango porque yo tengo los documentos de cuándo la compré”, señaló.
Zumbado dice que el último espectáculo lo hizo antes de marzo del 2020, cuando llegó la pandemia, pero al cancelarse las actividades no pudo seguir y sin espectáculos tuvo que ver que hacía para mantener a los animalitos.
“Me hice cargo de los animales y nunca pedí ninguna ayuda, ni donaciones, nunca dejé entrar a nadie a mi casa para que vieran los animales”, comentó.
Menciona que se hizo una ventana en la casa para vender algodones dulces y granizados con tal de ganar plata para comprar alimento para los animales.
“La Policía venía por unos animales que estaban en peligro de extinción, pero yo no tengo nada en peligro de extinción, también buscaban armas y tampoco tengo, no estuve de manera ilegal, porque a Mango lo llevé a programas de televisión como a Giros, si estuviera ilegal no ando exhibiendome”, concluyó Zumbado.