Brigette Méndez, compañera sentimental del supuesto violador en fuga Alfonso Castro Núñez, cree en la inocencia de su pareja.
La muchacha de 21 años, mamá de dos niñas, asegura que siendo más joven, fue víctima de agresión sexual por una persona de la que prefirió no dar detalles, cuando conoció a Castro le contó lo sucedido y él siempre la respetó y apoyó, asegura.
“Esto es un trauma sicológico muy grande, de hecho cuando comencé la relación con él fue una de las cosas que le dije, ‘bueno, vea, cuando yo estaba más joven pasé esto (le detalló a él el abuso), a mí me pasa esto, depende de la situación que yo viva en el día’”.
“Porque si a mí me llega el olor a un perfume o una frase me recuerda ese momento (abuso), automáticamente me transporto a lo vivido, cuando lo recuerdo e intento dormir me agarran trastornos y muchos de estos ataques él (Castro) los vivió. Yo me desespero, grito, no puedo dormir, él estuvo conmigo, él sabe el daño que causa un abuso, por eso es que creo en su inocencia, además es padre de una niña”, manifestó Méndez.
Cuñadas lo defienden
Castro, de 29 años, es señalado por el OIJ de Sarapiquí como un violador en serie, le achacan siete casos que ocurrieron entre el lunes 27 de julio del 2020; el martes 1 de diciembre del 2020; el miércoles 9 de diciembre del 2020; el sábado 2 de enero; el jueves 21 de enero y dos violaciones el sábado 23 de enero, estas últimas de este año.
A él lo detuvieron el 1 de marzo y se fugó desde el 7, desde entonces su paradero es un misterio.
Brigette asegura que ellos tienen una hija de un año, ella tiene otra hija mayor de otra relación, pero que Castro la ve como propia, la familia vive junto a la mamá y hermanas de Brigette.
“El apoyo más grande que tengo ahorita son ellas (mis hermanas), una se me acercó un día de estos que estaba llorando y me dijo ‘hermana, no crea lo que está pasando porque yo no lo creo’, mis hermanas tienen quince años, catorce y doce años”.
“Mis hermanas dicen que es algo ilógico que a él lo acusen habiendo aquí siete mujeres para escoger, va a ir a otro lado a hacer daño. A nosotros nunca nos ha faltado el respeto, mi mamá estuvo internada quince días y él pasó con nosotras y mis hermanas nunca han dicho que les hiciera daño, al contrario, lo defienden a muerte”, afirmó Brigette.
“Todas las personas que lo conocen me apoyan”
Así como las hermanas, Brigette afirma que ha recibido apoyo de muchas personas que conocen a Castro.
“Recibo más de cien mensajes diarios de gente que lo conoce, me dicen ‘Brigette, tenga paz, él no es’, en cambio las personas que no lo conocen se alarman al escuchar que hay un prófugo violador en las calles y juzgan”, mencionó.
Agregó que a su hija mayor no la manda a clases para que no sea señalada; sin embargo, comenta que las maestras la apoyan y dice que creen en su inocencia.
Le pide que se entregue
La esposa dice que desde hace cuatro días no sabe nada de Castro, el temor de ella es que lo detengan y no volver a verlo, pero aún así le pide que se entregue, afirma que desde que se dio la fuga solo una vez tuvieron comunicación.
Comentó que este sábado 13 de marzo, Castro intentó entregarse en El Bambú de Horquetas, ella lo supo por una tercera persona, pero pidió que lo dejaran entregarse con nosotras (ella y las hijas).
“Él intentó hacer un arreglo con la Policía, él pidió que yo estuviera presente, también que sonaran todas las sirenas de las patrullas para saber si aceptaron el acuerdo, pero solo sonaron dos sirenas por quince minutos y todos los policías se esparcieron, luego me dijeron que ya era todo y me vinieron a dejar a la casa, o sea, rompieron el acuerdo”, manifestó.
Brigette lo había denunciado por violencia doméstica, pero asegura que lo hizo por un momento de impulso luego de un problema, menciona que se arrepiente de la denuncia.
La mujer concluyó pidiéndole a su compañero sentimental que se entregue, para saber dónde está, aunque señala que teme que no lo dejen volver a verlo.
“A él lo relacionan con una violación de un hombre y una mujer que ocurrió entre la noche del 22 de enero y del 23 de enero, pero esos días él no estuvo en Sarapiquí porque se fue desde el 21 de enero para San José y luego a Puntarenas”.
“El hombre es quien dice que mi esposo lo violó, pero mi esposo detesta a los homosexuales, a él no le gustan esas relaciones, aunque tiene amigos gays, los respeta, pero no les gusta esas relaciones”, expresó la mujer.
Ella no descarta que esté involucrado en robos, pero dice que espera las pruebas. Las autoridades mantienen la búsqueda de Castro.