EscucharUna cocinera de apellidos Montero Rojas, de 28 años y su esposo un constructor de apellidos Madrigal Pérez, de 33 años, podrían ir 30 años a la cárcel cada uno, para un total de 60 años de prisión.
Así lo pidió el fiscal Mario Castro en sus conclusiones del juicio que se le sigue a ellos por el homicidio de su hijo de 13 días de nacido.
El debate se lleva en el Tribunal Penal de Pavas y los padres son acusados de homicidio calificado contra el inocente.
La Fiscalía los acusa de golpear muy fuertemente al pequeño y generarle la muerte.
El pequeño nació el 24 de abril del 2019 en el hospital San Juan de Dios y murió a los 13 días de nacido en Alajuelita.
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El fiscal señaló que los testigos que llevaron al juicio mintieron en sus declaraciones en debate.
“Ninguno de los testigos ha dicho la verdad, a criterio de esta representación han sido complacientes”, afirmó.
“Está acreditado que la muerte se dio, aquí lo que necesitamos es saber ¿quién lo cometió?”, afirmó el fiscal.
El representante del Ministerio Público agregó que el acusado Madrigal Pérez no trabajaba y que los testigos intentaron sacarlo del sitio (la casa) para no vincularlo con la muerte, al señalar que había ido a trabajar con un tío en una construcción.
“¡Que se fue de la casa, se fue! Pero cuando realiza la acción delictiva de matar a su hijo, él se va cuando se ve envuelto”, detalló el fiscal, y agregó que el hombre intentó culpar solo a su esposa.
Además indicó que los demás hijos de esta pareja se salvaron al estar en manos del Patronato Nacional de la Infancia (Pani) porque supuestamente se trataba de un hogar inmerso en la violencia.
“Una familia ejemplar, señores jueces esto no es cierto, hay mucha prueba que hay violencia en esta familia”, explicó.
