Luany Valeria Salazar Zamora fue despedida por sus seres queridos la mañana de este miércoles 17 de junio en el cementerio de Río Azul de La Unión, Cartago.

La Fiscalía confirmó este miércoles 17 de junio que a la muchacha la asesinaron de siete puñaladas.

El cuerpo fue encontrado este lunes 15 de junio por su hermano y una tía, estaba dentro de unas bolsas negras enterrado en el patio de una casa vecina de la familia, en Linda Vista de Río Azul. Luany estuvo desaparecida desde la madrugada del miércoles 10 de junio.

Al finalizar el funeral, don Carlos Madrigal, padrastro de Luany, recordó haber visto hace unos días al sospechoso de este homicidio comprar unas bolsas de basura, en un supermercado que está a la par de un salón de belleza, propiedad de la mamá de Luany.

El sospechoso es un hombre de apellidos Mejía Araya, de 36 años, a quien don Carlos recuerda como una persona normal.

“Uno habla con ese hombre y no se imagina que puede cometer tan vil acto, imagínese que hasta lo vi comprando bolsas negras, no recuerdo con exactitud el día, pero sé que fue reciente”.

“Y si compró las bolsas antes de que mi hija desapareciera entonces ya estaba planeando lo que iba hacer. Incluso, él dijo en el chino (en el supermercado), ‘es que estoy arreglando el patio'”, comentó don Carlos.

El padrastro recordó que a Luany la encontraron dentro de unas bolsas grandes y ahora presume que fueron las mismas que el tipo compró delante de él.

“Mi hijastro, el hermano de Luany, pidió permiso para entrar a la casa en donde la dejaron, él vio que la tierra estaba removida y comenzó a escarbar hasta que tocó una bolsa y conforme quitaba más tierra la bolsa se veía más grande, él la rompió con sus manos y vio el pelo y atuendo que andaba mi hija”, recordó don Carlos.

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“¿Cómo me voy acostumbrar a vivir sin mi hija?”

Doña Patricia Zamora, mamá de Luany, describe toda esta situación como una película de terror.

“Esto es muy macabro, ahora conversamos todo esto de las bolsas, de la desaparición, de su hallazgo y quisiéramos creer que nada de esto es cierto.

“Pero la verdad es que esto más bien apenas empieza porque ahora viene lo más duro, estos días he estado acompañada, pero cuando vuelva a mi vida normal ¿cómo me voy acostumbrar a vivir sin mi hija?, lo más triste es saber que fue en la esquina de mi casa por donde siempre debo pasar, me duele mucho, me tiene muy triste”, dijo la dolida madre.

Además, a doña Ana Patricia le preocupa el hecho de que haya sido su hijo el que halló el cuerpo, está consciente que van a necesitar de mucha atención sicológica para afrontar todo el daño.

“Me preocupa que él haya tenido que desenterrar a su hermana, siento que a mi hijo le ha afectado mucho esto, lo he visto y sé el dolor que también lleva, esto ha sido muy desgarrador”, expresó.

Luminol mostró rastro de sangre

El OIJ allanó, este martes 16 de junio a las 8 de la noche, la casa en la que encontraron el cuerpo, hicieron pruebas de luminol y hallaron rastros de sangre.

Todo esto forma parte de la evidencia que tendrán las autoridades en contra de Mejía, quien vivía en esa casa porque, en apariencia, se dedicaba a cuidar a la abuelita.

Durante el allanamiento, el Ministerio Público decomisó un puñal y una pertenencia de la ofendida, no trascendió cuál. Además, Wálter Espinoza dijo este miércoles que el lunes anterior decomisaron el celular de la muchacha en un taller en San José.

La familia de la joven está segura que ella luchó hasta el final porque era muy fuerte y siempre se enfrentaba a los demás para defender a sus allegados. Los parientes creen que su muerte ocurrió en presencia de una señora de 84 años, abuela del sospechoso.

“No sé si él la drogó (a la adulta mayor), es una señora mayor, enferma, casi ni camina y necesita de cuidados. Con esa señora tan mayor ahí ese tipo la mató (a Luany)”, dijo el padrasto de la joven.

La Fiscalía pidió seis meses de prisión preventiva contra Mejía.