¡Qué curioso!, nuestros diputados son felices inventando comisiones de todo tipo y son buenos para darle largas.
Pero contrario a lo que podíamos esperar, a los legisladores de la comisión encargada de investigar la penetración del narcotráfico en la zona sur la brasa les quemó, cerraron el chinamo rapidito y sus resultados fueron un plato de babas.
Sus integrantes fueron Zoila Rosa Volio (PIN); Jorge Fonseca (PLN); Karine Niño (PLN); Floria Segreda (Restauración); Otto Roberto Vargas (Republicano Social Cristiano) y Erick Rodríguez (independiente). Luis Ramón Carranza (PAC) intentó hacer alguito.
Y es que las aguas del puente, presuntamente construido con recursos de la municipalidad del cantón de Corredores, se agitaron esta semana. El alcalde Carlos Viales es investigado por supuesta participación en la obra levantada en la finca de Darwin González, sospechoso de liderar una organización narco.
Miguel Ángel Cubero Fallas, quien trabaja (¿trabajaba?) como maestro de obras en la Municipalidad de Corredores, le soltó la sopa al OIJ y denunció que el alcalde le ordenó construirlo.
También embarra, con mensajes de WhatsApp, al ingeniero de la Municipalidad, Roberth Fernández Masís.
Mientras el escándalo toma fuerza, en diciembre los diputados aprobaron, más rápido que ligero, el ridículo informe de la comisión. Lo hicieron apenas ocho días después de la detención del alcalde Viales Fallas.
El alcalde Viales aprovechó su comparecenecia ante los diputados para dar la “vuelta olímpica” en las redes sociales e informar triunfante sobre la presentación de certificaciones y otras supuestas pruebas de descargo.
Los nuevos datos no habían trascendido cuando el Congreso aprobó el informe; sin embargo, confirman la pertinencia de haber investigado con seriedad y profundidad. En sus conclusiones ni siquiera mencionan al alcalde. ¿Se habrán al menos puesto rojos...?