La imprudencia de un conductor que manejaba sin licencia y, en aparente estado de ebriedad, por poco le cuesta la vida a su hijo de 4 añitos, quien resultó herido de gravedad cuando chocaron contra un puente. El pequeño fue trasladado al Hospital de Niños.
El accidente ocurrió este lunes a eso de las 2:30 de la mañana en Río Blanco de Limón, específicamente sobre un puente ubicado 25 metros al sur del minisúper Yabriel.
Julio Arguedas, jefe de la Policía de Tránsito de la región Atlántica, confirmó que el conductor, de apellido Garbanzo y de 24 años, no contaba con licencia motivo por el cual le hicieron un parte por ¢105 mil.
De acuerdo con la versión de las autoridades, Garbanzo perdió el control de su chuzo cuando iba pasando por un puente y pegó contra la parte de concreto que sostenía una baranda de metal.
Fue esta misma baranda la que sostuvo el carro, evitando que cayera al vacío.
Como producto del impacto, resultaron heridos Garbanzo y su compañera sentimental, una joven de apellido Solano y de 23 años; sin embargo, la peor parte la llevó el hijo de la pareja, quien salió expulsado del carro.
Los tres heridos fueron llevados de emergencia al hospital Tony Facio de Limón, pero debido a las heridas que sufrió el chiquito se tomó la decisión de llevarlo vía área hasta el Hospital Nacional de Niños.
Trascendió que el menor permanece internado en condición delicada debido a varias fracturas que sufrió en el cráneo.
En cuanto a las causas del accidente, Arguedas no descarta que todo se haya dado debido a que el conductor iba manejando pasado de tragos, pues el oficial que atendió el hecho aseguró que se le sentía un fuerte olor a licor.
El uniformado no pudo realizar la prueba de alcohol a Garbanzo, ya que por su condición fue llevado de inmediato al hospital.
Arguedas agregró que el carro sí contaba con una silla de seguridad para niños, pero no se ha determinado si el pequeñito iba bien asegurado.