Un niño lo están criando sus abuelos nicaragüenses en el vecino país del norte, luego de que su abuela materna lo sacará de Costa Rica por puntos ciegos y se los entregara a ellos.
La misma mujer que lo entregó lo habría reclamado, pues señala estar ‘desgarrada por su ausencia’; sin embargo, el juzgado de Familia de Nicaragua rechazó la solicitud de devolverlo. Así lo informó el Poder Judicial de ese país en su sitio web.
El Patronato Nacional de la Infancia (PANI) indicó que la situación es cierta y señalan que es un caso que está en proceso desde setiembre del 2021 y que, actualmente, está en apelación.
Esta situación se habría generado luego de que un tío materno del niño denunciara el caso. La abogada del hombre incluso había pedido permiso para que la mamá del pequeño lo pudiera ver, un día antes de que ella se fuera hacia los Estados Unidos.
El pasado 7 de diciembre del 2022 el Juzgado de Familia de Nicaragua dio su veredicto rechazando la denuncia por parte del tío contra los abuelos paternos.
“Es un caso presentado por el PANI como autoridad central del Convenio de La Haya. Existe una apelación pendiente de resolverse.
“Nosotros no podemos facilitar datos de casos. Está regulado. Solo nos referirnos de manera muy general a la intervención. Solo las partes podrían dar detalles y protegiendo la identidad del niño”, señalaron en la oficina de prensa del PANI.
De acuerdo con el PANI, las autoridades nicaragüenses indicaron que la abuela materna dijo sentirse “desgarrada” porque en Nicaragua no le permitieron ver a su nieto a quien extraña mucho.
“Pero al momento que decidió trasladar a sus nietos no midió las consecuencias que pudo haber tenido ese traslado ilícito para sus nietos y para ella misma, lo que se puede observar en el video aportado como prueba”, dijo el juez José Ramón Barberena Ramírez.
El Consejo Técnico Asesor de los juzgados de Familia señaló que valoraron que el tiempo de estadía del niño en Nicaragua ha desarrollado vínculos afectivos, sentido de arraigo y pertenencia a su familia paterna y el entorno que sus abuelos le prodigan se caracteriza por la higiene, organización, comodidad, servicios básicos y seguridad en su vecindad, sin indicios de violencia ni dentro ni fuera del hogar, por lo cual sugiere que le mantengan en Nicaragua.
No trascendió la edad del menor.