Oficiales de la Fuerza Pública hallaron, en una cuartería en San José, un botín que dejó abandonado un grupo de narcotraficantes.
Tras el respectivo permiso para ingresar al inmueble, los oficiales ubicaron algo pocas veces visto: un datáfono, que se cree era para cobrar la droga que se llevaban los compradores que no andaban efectivo.
Los líderes de estos grupos también van de la mano con la tecnología, y para complacer a su numerosa clientela que paga de cualquier manera, les pusieron a su disposición este dispositivo.
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Además del datáfono, decomisaron dos armas de fuego, 12 municiones calibre 9 milímetros, un cuchilla con hoja de 11 centímetros de largo, dos teléfonos celulares, 166 dosis de crack y 50 dosis de marihuana.
Tras el operativo no se logró detener a ningún sospechoso de lo decomisado.