La Policía de Control de Drogas (PCD) puso fin a las operaciones del laboratorio de marihuana hidropónica más grande del país, el cual estaba escondido en una alejada zona montañosa de Puriscal.
Lo más llamativo de este caso es que se trata de un laboratorio sumamente moderno, pues era abastecido de energía por medio de 120 paneles solares colocados sobre su techo.
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Además de desmantelar el laboratorio, los agentes antidrogas también detuvieron a un estadounidense de apellido Lewis, de 53 años, quien en apariencia estaría vinculado con esa actividad delictiva. Otro sujeto también fue capturado, pero su identidad no se dio a conocer.
“La Policía de Control de Drogas y la Unidad Especial de Apoyo allanaron simultáneamente dos propiedades localizadas en Puriscal y Parrita, en la primera era donde se ubicaba el laboratorio, donde los oficiales todavía se encuentran realizando las diligencias respectivas y han decomisado una considerable cantidad de plantas de marihuana, plantas secas y otros”, informó Seguridad Pública.
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Stephen Madden, director de la PCD, explicó que el laboratorio hidropónico estaba en una propiedad de grandes dimensiones y fue forjado con una estructura metálica con el fin de almacenar y cultivar plantas de marihuana en un espacio controlado. Además destacó que contaba con 15 aires acondicionados.
“En la propiedad donde se hallaba el laboratorio de marihuana hidropónica también había un generador eléctrico y otro equipo de gran capacidad. La propiedad cuenta con dos lagos, invernaderos y otras cuatro infraestructuras”.
Según la investigación de los antidrogas, en dicho laboratorio se producían marihuana y sus derivados para abastecer los sectores comprendidos desde Quepos hasta Jaco, Puntarenas.