Los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) desarticularon este miércoles a una banda sospechosa de explotación sexual.
Los investigadores de la sección de Violencia de Género realizaron seis allanamientos en Barrio Escalante, Curridabat, Pavas, Rohrmoser y ciudadela 25 de julio (Hatillo).
Según explicó Randall Zúñiga la banda se dedicada, aparentemente, a la trata de personas con fines de explotación sexual.
“Básicamente, se trata de nueve personas, ya se logró detener al cabecilla de apellidos Morales”, dijo Randall Zúñiga, director del OIJ.
La esposa del hombre, una mujer de 31 años, también es sospechosa.
“Establecieron presuntivamente toda una organización criminal la cual se dedica a reclutar mujeres para que en apariencia den algún tipo de masaje terapéutico; sin embargo, cuando ya llegan las personas, pues, evidentemente ya no se trata solamente de un masaje terapéutico sino también de un continuo sexual explícito que se le ofrece a los clientes como tal”, dijo el jefe policial.
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Añadió: “A las mujeres se les obligaba a realizar este tipo de acciones y se establece una pena de que tengan que pagar algún tipo de multa o algún tipo de indemnización si no realizaban estas acciones. Con esto el OIJ reafirma su compromiso con todas las mujeres del país, para tratar de erradicar este grave problema”.
Los investigadores lograron identificar 15 mujeres como víctimas y detuvieron a seis personas, entre ellas cinco mujeres de apellidos Godinez, de 29 años; Ureña, de 29; Vargas, de 19; Barboza, de 28; Picado, de 39 y Morales, que es el líder.
Durante los allanamientos, los investigadores lograron decomisar 12 teléfonos celulares, un disco duro, cuatro automóviles, tres computadoras, dos tablets. Además, documentación y un millón de colones.