El guarda de seguridad Arlen José Rizo García, de 28 años, estaba preparando la cena en su trabajo cuando la muerte lo sorprendió.
El vigilante estaba en compañía de un compañero, cuando dos delincuentes los atacaron y en un forcejeo Rizo recibió dos balazos, uno en el pecho y otra en la cabeza.
El suceso se dio este sábado a las 6:30 p. m., dentro del residencial El Portillo, en San Isidro de Heredia.
Las autoridades presumen que los sospechosos llegaron al lugar con la intención de robarse unas herramientas de construcción.
Luego de los disparos, los atacantes huyeron solo con un celular. Al parecer, escaparon por un lote y dieron salieron a una calle cercana, donde los esperaba un carro.
Según se supo, la casa de dos plantas que cuidaba el guarda asesinado iba a ser entregada a sus propietarios en dos semanas.
Los oficiales de la Fuerza Pública informaron que en el lugar del crimen hallaron seis casquillos de revólver calibre 38.
Los oficiales mantuvieron en la escena al compañero de la víctima, ya que el testimonio es fundamental en el caso y necesitaban que le contara a los agentes del OIJ todo lo que recordaba de los homicidas.
De acuerdo con vecinos, quienes prefirieron no decir el nombre, en las últimas semanas se han dado robos en otras construcciones o casas terminadas de la zona. Los maleantes persiguen principalmente grifería, baños y artículos de acabados.