Las hermanas Ana Gabriela y Natalyn Bonilla se ahogaron el viernes en el río Pejibaye, en Jiménez de Cartago.

Kattya Alejandra Bonilla, de 34 años, sobrevivió.

Además de unidas, Ana Gabriela y Natalyn eran muy trabajadoras ya que debían hacer frente a la crianza de cinco hijas en total. Ellas tenían 28 y 23 años respectivamente y en la tragedia también falleció el jefe de ambas, Carlos Roberto Víquez Gómez, de 57 años.

Trascendió que Víquez tenía siete hijos, todos mayores de edad. Ana Gabriela dejó tres chiquitas de 13, 11 y 8 años; Natalyn tenía dos niñas de 3 y 2 años.

Un solo accidente acuático dejó sin sus papás a 12 personas.

Juan Calvo, esposo de Kattya, afirmó que tuvieron que dividirse las chiquitas entre la familia porque es lo que hubiesen deseado sus cuñadas.

“Mi esposa y yo somos padrinos de las hijas de Natalyn, por lo que nos vamos hacer cargo de ellas junto con otra hija de Ana Gabriela. Las otras hijas de ella se quedarán con el abuelo y otra hermana de mi esposa de nombre Auxiliadora”, dijo Juan.

Agregó que necesitan ayuda para criar a estas pequeñas.

“Siempre hay personas de buen corazón y si nos pueden ayudar lo agradeceríamos mucho. Lo único que pedimos es ayuda por las niñas, de las demás necesidades de una casa nosotros trataremos de hacernos cargo. Necesitamos pañales, leche y juguitos para las más pequeñas así como la comida especial”, agregó.

Un año doloroso

Las hermanas serán sepultadas en el cementerio de Paraíso, donde descansan los restos de la mamá de ellas, Olga Gómez, quien el 26 de febrero cumplirá un año de fallecida.

“Ha sido muy difícil, en un año perdimos a tres personas de la familia, mi suegra murió de un paro cardiorrespiratorio”, contó Juan.

LEA MÁS: Tratar de salvar a una joven provocó que tres personas murieran ahogadas en el río Pejibaye

Añadió que a pesar del dolor saben que deben seguir unidos.

La fatalidad en la que murieron las dos hermanas y su jefe ocurrió este viernes 12 de febrero, al mediodía, en Tucurrique de Jiménez, Cartago.

Juan Calvo informó que las hermanas trabajaban sembrando cebollas en una finca de Tierra Blanca que era propiedad de Carlos Roberto Víquez.

“Tenían tres semanas de estar trabajando en la finca de Roberto, el paseo lo planearon el viernes en la mañana, ¿quién se iba a imaginar que iba a ocurrir una tragedia de estas?”, se preguntó Calvo.

Afirmó que su esposa está fuera de peligro, pero muy golpeada emocionalmente y físicamente porque también estuvo en el agua unos minutos.

“Con mi esposa no he hablado mucho sobre lo que pasó, pero sé que Ana Gabriela se resbaló y cayó al agua, el jefe se fue detrás de ella y Natalyn también, pero nunca salieron”, dijo.

Tenían tres semanas de trabajo

Natalyn vivía en El Tejar de Cartago y Ana Gabriela en Cachí, pero estaban sin trabajo por lo que hace tres semanas comenzaron en la siembra de cebollas..

“Ellas siempre habían sido muy trabajadoras en la agricultura, por la falta de trabajo se vinieron a vivir entre semana a nuestra casa, en Cot de Cartago, y los sábados se devolvían para las casas de ellas.

“Se iban a trabajar desde las cinco y media de la mañana y regresaban a la una de la tarde, lo hacían bajo el sol o bajo el agua”, explicó.