La doctora María Luisa Cedeño Quesada sufrió múltiples golpes, pero los que le provocaron la muerte fueron en el tallo de la cabeza, los cuales que le desplazaron las primeras dos vértebras.
Esto lo confirmó la patóloga Silvia Fernández, quien es la segunda testigo del juicio que se lleva a cabo por el asesinato de la anestesióloga.
Fernández sostuvo que determinar cuál de todos los golpes fue el que le provocó ese grave daño fue imposible, debido a que Cedeño recibió gran cantidad de impactos.
Sostuvo, además, que todas las heridas que María Luisa presentaba las recibió estando viva, debido a que le quedaron moretes y desgarros que quedan con marcas porque aún tenía vida, explicó la experta.
Como si eso fuera poco, también sufrió desgarros en sus partes íntimas, los cuales generan mucha pérdida de sangre.
Las fuertes lesiones se las provocaron con algún objeto contuso, el cual no tiene ni punta ni filo.
En la autopsia también encontraron heridas de defensa, como por ejemplo en el antebrazo derecho, donde tenía la marca de una mordedura, además trozos de uñas arrancadas.
La doctora fue hallada sin vida el 20 de julio del 2020 en el hotel La Mansión Inn, en Manuel Antonio de Quepos.