Minutos de horror se vivieron en el parque Alberto Manuel Brenes en San Ramón de Alajuela cuando un hombre armado amenazaba a todos y luego sin piedad alguna mató a puñaladas a un perrito.
Al peludito le pusieron de nombre Canelo, porque en apariencia era de los que andaban en el parque del cantón.
La Policía Municipal de San Ramón atendió la emergencia a las 10:30 a.m. cuando recibieron una denuncia teléfónica en la que una persona señalaba que un sujeto se comportaba violento con un puñal.
“Inmediatamente se le da aviso por radio a los oficiales municipal que andan en recorrido quienes ubican al hombre, se comporta violento, intenta agredir a los oficiales con el arma blanca (puñal) los mismos lo reducen a la impotencia y lo detienen.
“Desgraciadamente en el transcurso de que se recibe la denuncia y llegan los oficiales este sujeto apuñaló a un perrito que falleció”, señaló Logan Santamaría, encargado de la Policía Municipal de San Ramón.
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A muchos lugareños se les salieron las lágrimas al ver que no había nada qué hacer por el peludito, además estaban asustados al también ser amenzados.
Agregaron que el tipo permanece detenido en las celdas de Palmares y a las 5 p.m. lo presentarán a la Fiscalía por diferentes delitos.
Una veterinaria del Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) llegó al sitio e hizo un informe de las heridas que sufrió Canelo y estas también serán presentadas a la Fiscalía.
La rápida intervención evitó que además de Canelo hubiese personas heridas.
La identidad de este sujeto no ha trascendido.
Maltrato animal
La Ley de Maltrato Animal establece que la pena será de seis meses a dos años de cárcel para quienes causen un daño a un animal que lo debilite, persistentemente, en su salud o implique la pérdida de un sentido, órgano, miembro o le cause sufrimiento intenso y agonía prolongada.
Además, la pena será de seis meses hasta tres años de cárcel para quien provoque, directa o indirectamente, la muerte de un animal (de cualquier especie), producto de las conductas referidas anteriormente.
Los jueces pueden otorgar a los sentenciados el beneficio de ejecución de condicional, con lo cual no van a prisión o bien enviarlos a la cárcel.