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El joven minero Isaac Picado Villalobos, de 24 años, les dejó un hermoso recuerdo a su esposa y a sus dos pequeños antes de perder la vida a consecuencia del enorme deslizamiento que lo sepultó el pasado viernes en Abangares de Guanacaste.
Así lo contó a La Teja Yamileth Medina Orozco, esposa de Isaac, quien aseguró que ese último recuerdo que les dejó su esposo se convirtió en un tesoro que guardarán con mucho cariño por el resto de sus vidas.
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“Esta fue la última foto que nos tomamos en familia, fue el jueves en la noche. Estábamos viendo películas en la sala de la casa. Fue una noche muy bonita en familia”, dijo Medina.
En la fotografía, que Yamileth facilitó a este medio, se observa a Isaac muy sonriente junto a sus dos pequeños hijos, una chiquita de 4 años y un niño de 2, ambos eran el orgullo del joven minero.
En cuanto al funeral de Picado, su esposa explicó que posiblemente se vaya a realizar la tarde de este martes, ese último adiós se lo darán en el cementerio de San Juan Grande de Abangares.
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Medina contó que también estaban valorando cremar el cuerpo de su amado con ayuda de una funeraria, pero al final decidieron sepultarlo, pues querían que todo el pueblo de Abangares pudiera despedirse de él.
Yamileth finalizó diciendo que ella y su familia estaban muy agradecidos con todo el apoyo que recibieron de las decenas de personas que de forma incansable estuvieron buscando a su esposo, así como con todos aquellos que los tuvieron en sus oraciones.
