EscucharWendy Batista Pérez nunca imaginó que su hijastro, por quien muchas veces se preocupó y al que trataba como de su propia sangre, es acusado de ser el judas que le puso una trampa mortal.
“Cuco”, el sobrenombre hijastro de la mujer, volvió a sonar en los Tribunales de Cartago en el juicio por el asesinato de Batista, el cual al parecer ocurrió por orden del narcotraficante Luis Martínez Fajardo, alias el Pollo.
Kenneth Batista Pérez, hijo de la fallecida, declaró este miércoles. Él llegó a las salas de juicio acompañado de los agentes de Cárceles pues desde hace cinco años está encerrado en la cárcel La Reforma.
“Estoy recluido por pertenecer a la banda de Martínez Fajardo dedicada al tráfico de drogas”, le comentó a los jueces y de inmediato habló sobre el cariño que ella le tenía al acusado.
“Mi mamá se llevaba bien con Cuco, cuando él estuvo encarcelado (en el Zurquí) ella le llevaba comida y cuando salió de ahí hasta le ofreció casa”, recordó.
Kenneth afirmó que la pesadilla por el homicidio de su mamá comenzó el miércoles 2 de agosto del 2017, cuando dentro de la cárcel le llegaron amenazas en contra de su familia, las intimidaciones también fueron para otros siete reos.
La razón era porque Kenneth y los demás no querían hacer más trabajos para la organización del Pollo.
Él cuenta que todos los reos amenazados llamaron a sus parientes y les dijeron que se fueran de donde vivían, que se escondieran. Wendy solo lo hizo la primer noche y al siguiente día la mataron.
Agregó que a su mamá la llegaron a buscar con la excusa de que había una reunión para las mamás de los privados de libertad.
“Mi mamá me dijo que Cuco la había estado llamado, que le decía: ‘todo va a estar bien, no se preocupe, luego Kenneth solo debe hablar conmigo’. Entonces yo le dije a mi mamá que no confiara en él, pero me dijo que sí confiaba porque era el hijo de Marco (la pareja sentimental de la víctima).
“Un mensaje que Cuco le envió y ella me leyó decía: ’Tranquila Wendy, nada le va a pasar a usted, ni a mi papá, ya hablé con Pollo’. La llamé en la tarde y Marco (la pareja sentimental) me dijo que todo estaba bien, que mi mamá andaba en la reunión, además que Cuco le había dicho que la iba a cuidar.
“Pero yo ya sabía que no había reunión porque las demás mamás se habían puesto a salvo, incluso uno de mis compañeros de celda en ese momento estaba hablando con la mamá de él. Entonces pedí el número de Cuco y cuando me contestó me dijo: ‘El que es mandado no es culpado compadre’. Luego escuché una voz que decía: ‘Ya empezamos a matar a las mamás a nombre de Pollo, eso les pasa por torcidos’ y me cortaron. Llamé a mi tía para informarle que me habían matado a mi mamá y que no confiaran en Cuco”, le dijo a los jueces.
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Este juicio es contra tres supuestos integrantes de la banda del Pollo, identificados como Álvarez “Rata Calva”, Rivera “Gazú” y Morales “Messi”.
Cuco y otro menor al que le dicen ‘Coca’ llevaron un proceso aparte por la muerte de Wendy. A uno de ellos (la Fiscalía no detalló cuál) se le condenó a 8 años de cárcel y para el otro se ordenó un juicio nuevo.
Kenneth concluyó diciendo que los imputados “Rata Calva” y “Gazú” son los hombres de confianza del Pollo, mientras que catalogó a “Messi” como uno de sus “perrillos” por ser de los mandaderos.
