La abuelita paterna de la enfermera María Ester Murillo Chavarría, de 26 años, quien apareció asesinada junto a Luis Alejandro Ramírez Quirós, de 31 años, en Curridabat publicó un emotivo mensaje en la página de Facebook de su Floristería Fiesta y Amor.
“Floristería Fiesta y Amor sufrió la pérdida de un ser muy especial y querido. Sufrimos la pérdida de mi nieta María Esther. Una nieta ejemplar, luchadora, tu sonrisa caracterizaba tu esencia única y especial”, dice la publicación.
“Hoy nos invade la tristeza y el dolor en nuestros corazones. Hoy por hoy, doy gracias a Dios por darme el privilegio de ser tu abuela. Fuiste una nieta maravillosa, te amo y te amaré por siempre, María Esther. No muere quien se va, solo se muere a quien se olvida. Por siempre en mí, te amo y te amaré”.
Doña María Artavia es la abuelita de la joven y dueña del negocito ubicado en Cariari de Pococí.
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La pareja de jóvenes fue encontrada sin vida en Curridabat la madrugada del viernes 22 de julio, ambos trabajaban en la Caja Costarricense de Seguro Social .María era enfermera en Emergencias del Hospital Calderón Guardia y Luis trabajaba en aseo en el Hospital Nacional de Niños.
Las autoridades sospechan que ellos fueron asesinados en otro sitio y los dejaron abandonados en Hacienda Vieja de Curridabat, precisamente al inicio de la autopista que comunica San José con Cartago (Florencio del Castillo).
La enfermera recibió un disparo en la cabeza y el joven dos por la espalda, a la par de sus cuerpos había una moto, por lo que en un principio se creyó que eran víctimas de un accidente de tránsito, ellos aparentemente viajaban en esa moto, ambas víctimas eran amigos.
Natasha Blanco, amiga de María Ester, aseguró que ella era una persona con una vibra especial.
“Todas las personas que conocimos a Mari nos sentimos en shock, ella era una muchacha con unos sentimientos que valían oro, tenía una sonrisa que siempre lograba que las personas que estuvieran cerca de ella se sintieran bien.
“La verdad es que nadie se explica qué fue lo que pasó, al muchacho yo no lo conocía, con ella la relación fue porque ambas estudiábamos Enfermería, pero yo después me pasé a estudiar Medicina, pero manteníamos la amistad”, dijo Blanco.
“Hace como un mes nos vimos en el hospital (Calderón Guardia) y nos saludamos con el mismo cariño de siempre, yo andaba acompañando a mi mamá a una cita y compartimos por unos minutos. Me dijo que se sentía muy feliz y que tenía mucho trabajo.
“Mari era de esas muchachas que siempre vivía al máximo, ella siempre tenía amor para todas las personas a su alrededor, le gustaba chinearse y cuidarse mucho a ella misma, era luz en la vida de los demás, como enfermera siempre atenta y cariñosa con los pacientitos, yo de verdad no puedo creer lo que pasó, quedamos en vernos en unos días para almorzar. Dios quiera que logren dar con las personas que lastimaron tanto a estas dos familias”, dijo la joven.
Este sábado el OIJ informó que no tienen claro el móvil del doble asesinato, aunque trascendió que se pudo deber a algún tipo de riña en un bar donde estuvieron los jóvenes, las autoridades judiciales no han confirmado esa versión.
Los dos jóvenes eran vecinos de Puriscal y fueron despedidos este sábado en distintas comunidades.