Un colombiano de apellidos Yepes Velásquez, de 35 años, fue torturado y asesinado de varios balazos.
Los restos de la víctima aparecieron en la entrada a la planta hidroeléctrica en Santiago de San Ramón, sobre la carretera conocida como Jesús Cambronero, que lleva hacia Esparza.
Carlos Hidalgo, vocero del Ministerio de Seguridad, afirmó que el extranjero fue amarrado de pies y manos, tenía una cinta en la boca y un balazo en la cabeza. El hallazgo ocurrió este martes a las 10:30 p. m.
Wálter Espinoza, director del OIJ, afirmó que el suramericano fue identificado gracias a un tatuaje y están a la espera de los resultados forenses. El hombre recibió los balazos en la cara y el cuello.
"Aún no está establecido el móvil, los vecinos reportaron haber escuchado los balazos en el lugar, por lo que presumen que lo mataron allí", expresó Espinoza.
Yepes tenía antecedentes por robo agravado y portación de armas, al parecer vivía en el país desde hace cuatro o cinco años en Guadalupe, San José. Las autoridades no le conocían una actividad económica por lo que no descartan que este crimen se deba a problemas por narcotráfico.