Los familiares del estadounidense Stephen Sandusky, de 61 años, así como los de Willy Borbón Muñoz, de 38 años, tendrán que esperar un poco más para sepultarlos, ya que sus cuerpos deberán permanecer más días en el Complejo de Ciencias Forenses, en San Joaquín de Flores.
Los cuerpos de ambos fueron a los que sus asesinos les prendieron fuego, por lo que los forenses deberán hacerles más exámenes.
“Están pendientes los estudios de antropología y odontología forense para obtener elementos que permitan la individualización (identificación) de los restos, de resultar infructuosos debemos proceder con el estudio de ADN, que sí requiere de varias semanas para tener el resultado”, afirmaron por medio de la oficina de prensa del complejo.
Willy y Stephen son parte de las seis víctimas de una masacre que ocurrió el propiedad de este último en Llano Bonito de Buenos Aires, Puntarenas.
Los restos de las otro cuatro víctimas ya fueron entregados a sus allegados, se trata de los esposos César Quesada Cascante y Alina Villarevia Rivera, así como el hijo mayor de estos, Daniel Quesada Villarevia y la amiga de Alina: Susan Zúñiga Rodríguez.
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Papás muy fortalecidos
Este miércoles a las 9 a.m., los familiares despidieron al matrimonio en el cementerio de Rivas de Pérez Zeledón y muchas personas se acercaron, pues eran muy conocidos en la comunidad.
Daniel Quesada, por su parte será incinerado y este jueves llevarán sus cenizas para colocarlos al lado de los restos de sus papás.
Don Eladio Quesada, papá de César le dijo al medio regional TV Sur Pérez Zeledón que le pide a Dios la fuerza de sus seres queridos para seguir adelante.
“Nosotros hablamos con Dios, le dijimos: ‘Diosito usted nos los regaló, nosotros se los devolvemos, pásanos las fuerzas de ellos tres para seguir, porque sin el poder de Dios no hubiésemos soportado esto”, dijo este padre, quien fue uno de los que descubrió la tragedia, junto con el papá de Alina.
Las mamás de este matrimonio están muy fortalecidas a pesar del dolor que cargan por dentro.
“Ellos estaban en el lugar que tenían que estar, porque de ahí Dios se los llevó, era el momento, el día, la hora. Todo se lo pongo en manos de Dios y en medio de este dolor lo alabo y lo bendigo”, expresó doña Odilia Cascante, mamá de César, a TV Sur.
Patricia Gamboa, prima segunda de Alina, comentó que la mamá de Alina está llena de paz, pese a lo sucedido.
“Queremos que esto nunca más vuelva a suceder, ayer decía mi prima Olga (mamá de Alina) que los perdona. Ella tiene un corazón increíble, solo le pido a Dios la fortaleza para estas familias”, expresó.
Finalmente don Miguel Navarro que en la comunidad están impactados por la masacre.
“No se esperaba esto, es muy duro, ahora nos queda apoyar a los hijos que quedan y que Dios les dé fuerzas”.
Susan será sepultada este jueves a las 9 a. m., en el cementerio Colinas de Paz en Limón, de donde era oriunda.