Vivian Solís revivió todo el dolor de perder a su único hijo cuando vio las impactantes fotos de cómo quedó el carro de la presentadora Keyla Sánchez, quien se accidentó el pasado 31 de marzo en el peaje de Ciudad Colón.
Álvaro Andrés Hernández Solís era el hijo de doña Vivian y él murió por culpa de un chofer que, en apariencia, iba ebrio, manejaba a alta velocidad y además se brincó un semáforo.
Hernández tenía 21 años y le faltaban solo 15 días para graduarse como ingeniero industrial.
Su vida se apagó el sábado 10 de julio del 2011, cuando viajaba en un carro pequeño que fue golpeado con mucha fuerza por un vehículo grande, así como el que tenía la presentadora. Ese accidente ocurrió en los semáforos que están por el cruce de Doña Lela, sobre la ruta 32 (calle San José-Limón).
“Donde que vi ese carro tan grande (el de Keyla) me impactó mucho y entonces le escribí a ella unas palabras desde mi Facebook, no sé si las ha leído, pero ojalá lo haga, le dije que me disculpara por llamarla ‘mi hijita’, por el abuso de confianza, y le preguntaba: ‘¿Qué hubiera pasado si hubiese golpeado a un carro pequeño y mata a inocentes?’ Y justamente desde ahí le digo cómo murió mi hijo”, expresó esta madre, quien aclara que no está juzgando ni hablando mal de la presentadora, simplemente su incidente le recordó el de su muchacho.
Afirma que esas palabras que le dijo fueron un llamado de amor que quiso hacerle, tanto a ella como a los demás conductores, para que no causen dolor en sus propias familias, mucho menos en las de inocentes.
“Me dirigí a ella porque vi las fotos, reviví el dolor, lloré mucho y le agradecí a Dios que ella quedó viva, por su juventud. No la conozco, pero su accidente me caló, no la estoy enjuiciando, ni señalándola, solo le hago un llamado de amor.
“No sé si ella manejaba tomada, no me consta, pero si fue así ojalá que no lo vuelva a hacer, quisiera que este llamado sea para todos, porque quizás no les ha pasado nada (quedar mal físicamente), ni han matado a nadie, pero es importante que recapaciten porque los daños son irreparables”, afirma esta mujer que daría todo por volver abrazar a su hijo.
Agrega que a la joven presentadora Dios le dio otra oportunidad y dice que ojalá la valore. Espera que, si Keyla no ha leído sus palabras, sí sirvan para que muchas personas hagan un cambio y sean más responsables frente a un volante.
“Pudiste destruir a toda tu familia y a otra ajena, sé que eres una joven de valores de fe, por tanto sabes que Dios Padre te dio otra oportunidad de vida, pues tienes un inmenso propósito en la tierra”, fue parte de lo que le escribió.
LEA MÁS: Cuando la prensa anuncia la muerte del hijo único
Madre pide que no haya más inocentes
Esta madre asegura que nunca se supera la muerte de un ser querido, menos si es por un homicidio o por un accidente de tránsito culposo, por eso insiste tanto en llegarle a los conductores.
“Es un daño irreparable, hasta el fin de mis días mi llamado será de súplica para que no manejen bajo los efectos del licor, ni tampoco a alta velocidad y no es solamente para Keyla.
“Escribí unas palabras especiales para Keyla porque cuando murió mi hijo quedé con los brazos abiertos, llenos de amor de madre, y esa criatura podría ser mi hija, entonces con todo el amor del mundo le aconsejo que maneje con cautela. La idea es que los demás conductores sepan que cuando andan bajo los efectos de alcohol tienen en sus manos un arma y están dispuestos a matar, soy una madre que intenta que otros inocentes no mueran en manos de personas ebrias”, señala.
LEA MÁS: ¿Por qué el video del choque de Keyla Sánchez no trascendió como en otros casos?
Doña Vivian no pudo tener la paz de que se hiciera justicia ya que los jueces dejaron libre al responsable argumentando que no tenía la intención de matar al muchacho.
“En los accidentes, en que se involucra una persona ebria, por lo general no le pasa nada, pero los inocentes sí mueren. Soy creyente y le pido a Dios que tenga misericordia de ese pobre hombre que me quitó a mi hijo por su actuar, porque algún día todos tenemos que dar cuentas y este dolor desgarrador que siento no puede ser en vano, ese conductor irresponsable destrozó a toda mi familia”, concluyó la mamá.