Doña Patricia Seibert ha vivido 57 días de gran desesperación y en cada uno siempre le pide a Dios poder encontrar a su hijo, Christian Tijerino López, de 33 años, quien decidió venir a Tiquicia a pasear y desapareció.
Tijerino y su familia son costarricenses, pero desde hace muchos años se fueron a vivir a Estados Unidos, por lo que ya tienen la ciudadanía.
Doña Patricia nos contó que su hijo acostumbraba venir cada dos años a pasar las vacaciones al país y la última vez que lo hizo fue en diciembre del año pasado. Su idea era festejar su cumpleaños, que fue el 24 de febrero, en Costa Rica y luego regresar al lado de su madre a inicios de marzo.
“Él había estado con la familia, con su abuelita y con algunos de sus amigos. Siempre nos mantuvimos en contacto y yo hasta conversaba con sus amigos durante las llamadas, por lo que todo parecía muy normal y él estaba muy contento”, dijo la mamá.
Un amigo de Christian tiene un hostel (albergue) en Tamarindo por lo que este año él se fue a pasar varios días allá, pues según Seibert a su hijo le gusta surfear y esa playa le encanta.
Christian, de 33 años, desapareció el martes 18 de febrero y su mamá supo que salió con una amiga el domingo 16 porque él se lo contó y que el lunes 17 estuvo con uno de sus primos en San José, por lo que su idea era regresar a Tamarindo ese martes.
“Mi hijo andaba en su carro, un Ford Explorer, que se lo había comprado a una amiga en California y lo tenía en Costa Rica para cuando íbamos de paseo. El día que desapareció salió del hotel en el vehículo y nos dicen que al parecer se quedó sin gasolina frente a la escuela de Bagaces, así que él se estacionó a un lado de la calle y cuando estaba ahí llegaron tres hombres. La gente pensó que era para ayudarlo, pero lo bajaron a la fuerza del carro y lo montaron en un vehículo gris, mi hijo gritaba: “No por favor, no!”, y se lo llevaron", narró la mamá quien no puede contener el llanto al contar lo sucedido.
Doña Patricia asegura que varios testigos dieron aviso a la Policía, pero la patrulla llegó dos horas después. A él se lo llevaron a eso de las 6:15 de la mañana.
“Los testigos también mencionaron que durante la llamada al 911 ellos pidieron que la policía bloqueara la autopista. Esto es muy frustrante”, dijo.
El carro de Tijerino fue inspeccionado un día después de su desaparición y adentro estaban su tabla de surfear y varias pantalonetas pues él tenía planeado regresar con su amigo a Tamarindo.
“Nosotros pensamos que iban a llamar para pedir un rescate, pero eso no ocurrió y más bien no hemos sabido nada más sobre el caso. Mi hijo es un buen muchacho, hijo y hermano, trabaja en sistemas informáticos y en carpintería, es muy trabajador y no entendemos por qué le ocurrió esto”, dijo Seibert.
Uno de los primos del tico puso la denuncia y sus hermanas gemelas, Kelly y Johanna, también hicieron contacto con las autoridades judiciales y la Embajada de Estados Unidos en Costa Rica.
“Él es mi hijo mayor y vive conmigo, así que no le puedo decir lo que yo siento como madre, yo me acuesto y me levanto preguntándole a Dios ¿dónde está mi hijo? El no tener respuesta me desespera, ahorita estoy incapacitada porque no tengo paz, mis nervios están de punta, pase varios días en shock y mis hijas tuvieron que hacerse cargo la situación”, dijo la mamá.
Doña Patricia vino al país y estuvo pegando fotos de su hijo en varios lugares, además conversó con el OIJ, y solicitó a la embajada su intervención.
“Los primeros días parecía que el caso avanzaba, pero ahora todo se quedó estancado con esto del coronavirus. Yo llamo entre tres o cuatro veces por semana al OIJ de Liberia para suplicarles que no se olviden de mi hijo y preguntar si hay algo nuevo, pero hasta ahorita nada. Yo le pido a Dios que mueva los corazones de la gente para que si alguno sabe algo le diga al OIJ”, dijo la mujer.
A la distancia esta sufrida familia asegura que solo la oración les da fuerza y ruegan por reencontrarse pronto con su ser querido.
“Esto que estamos viviendo no se lo deseamos a nadie, por eso les pedimos que nos ayuden, que compartan las fotos de mi hijo para que no dejen de buscarlo”, dijo Seibert.
Si usted sabe algo de Christian o tiene alguna información llame al Centro de Información Confidencial del OIJ al teléfono 800-8000645 o al Whatsapp 8800-0645.