Doña Ana Lorena Quesada dice que el dolor de perder a su hijo Lenín Ortiz Quesada, de 46 años, en un fatal atropello la acompañará hasta el día de su muerte.

Él fue uno de mis cuatro deportistas que murieron debido al accidente ocurrido el domingo 28 de enero del 2017, a un costado del Walmart de Curridabat.

Además de Lenín fallecieron Mario Retana Pérez, de 49 años; Pablo Alcócer Alcócer, de 54 y Lucía Mata Durán, de 38 años.

La mamá de Lenín contó este lunes, antes de que empezara el juicio por el dramático caso, que el día del percance cambió su vida para siempre, sin embargo, en un intento por recuperar la paz decidió perdonar al chofer de apellidos Mora Monge.

“Él me buscó, nos reunimos y me pidió perdón. Lloró bastante y yo sentí que fue sincero; lo perdoné porque no soy una persona que guarda odios, ni rencores, no puedo.

“Estos últimos días fueron muy duros porque uno recuerda todo de nuevo y el dolor es más fuerte que nunca”, relató.

Doña Ana Lorena contó que Lenín había comprado una casa en Orotina y tenía planeado que cuando se pensionara se iría a vivir ahí con su familia y con los papás.

“Esa casa es muy especial para nosotros por el sueño que él tenía de vivir ahí. Cuando yo me siento triste me voy unos días para allá porque me siento cerca de Lenín.

“La semana pasada la pasé en esa casa porque necesitaba tomar fuerzas para el juicio, dos días estuve llorando mucho, ya luego me tranquilicé un poco; oré, hablé con Dios, fue un tiempo muy provechoso y ahora me siento mejor”, relató.

La mamá del ciclista dice que desde que murió ha querido soñarse con él, pero no ha podido.

“Yo no sé si será que él se fue enojado conmigo por algo, porque no lo he visto en sueños; tampoco se despidió de mí, de la esposa sí, le habló mientras ella dormía”, recordó.

Don Jenaro sin aflojar

Pese a que en la audiencia preliminar realizada en noviembre pasado los abogados que representan a los familiares de las cuatro víctimas no se pusieron de acuerdo con los representantes del acusado, este lunes el panorama fue muy distinto.

A las 8:30 de la mañana cuando estaba por iniciar el debate, el abogado José Pablo Badilla defensor del acusado, les pidió a los jueces un tiempo para terminar de conversar con los familiares de las víctimas, ya que en las últimas semanas hubo reuniones y acercamientos para conciliar.

A las 10:30 a. m. se retomó la audiencia y los abogados de los parientes de tres de las víctimas aceptaron el acuerdo ofrecido por el acusado Mora que consiste en el pago de una póliza del Instituto Nacional de Seguros (INS) y otro monto que sale de sus bolsillos.

Al momento de hablar de la plata los jueces pidieron a la prensa salir de la sala de juicio ya que trataron el tema de forma confidencial.

Los familiares de Lenín Ortiz Quesada, Mario Enrique Retana Pérez y Pablo Enrique Alcócer Alcócer accedieron a aceptar el trato, mientras que Clara Durán y Jenaro Mata, papás de Lucía, se negaron ya que piden que el chofer vaya a la cárcel.

”Si él me saluda yo lo saludo porque a mí él lo que me da es lástima porque su familia debe de estar sufriendo también. Yo digo que ese hombre es un pobre diablo, ¿usted sabe lo que es dejar tres mujeres viudas?, él tendrá que pagarles, que se lleven la plata esas pobres mujeres”, dijo don Jenaro en una entrevista con La Teja la semana pasada.

Mientras él observaba el altar que le tienen a Lucía en la sala de la casa, relató que no tiene nada en contra de Mora, pero deja claro que debe pagar ante la justicia por el dolor causado a tantas personas.

Este lunes a las 3 de la tarde se retomaron las negociaciones sobre la plata que recibirían los afectados por lo que el inicio del juicio quedó pendiente.

Ahora quienes acusarán a Mora son la Fiscalía y el abogado Manuel Campos, representante de los papás de Lucía Mata. Ellos tendrán la oportunidad de contar en el debate como les ha afectado la muerte de la ciclista y lo mucho que les ha costado superar su muerte.