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Doce años tuvieron que pasar para que un hombre apellidado Montero Molina fuera condenado por convertir las vidas de sus dos sobrinas en un verdadero infierno. Los hechos se dieron cuando ambas eran menores de edad.
Así lo dio a conocer el Ministerio Público, el cual indicó que la Fiscalía Adjunta de Alajuela consiguió que el Tribunal Penal de esa provincia dictara una sentencia, de 68 años de prisión, contra Montero como responsable de ocho delitos de abuso sexual, dos de difusión de pornografía infantil y dos violaciones calificadas, en perjuicio de sus sobrinas políticas.
Los jueces dictaron la condena el pasado 23 de abril, la cual fue readecuada a 50 años de prisión, que es el tiempo máximo que una persona puede permanecer en la cárcel. La Fiscalía dio a conocer la resolución hasta este jueves.
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De acuerdo con las autoridades, el expediente contra el imputado fue abierto en el 2017, pero durante el proceso este huyó a Estados Unidos.
“El 26 de setiembre del 2023 las autoridades de ese país lo detuvieron y lo entregaron al Ministerio Público de Costa Rica”, detalló la Fiscalía.
Los hechos por los que Montero fue condenado ocurrieron entre el año 2010 y 2012 en la provincia de Alajuela, en una propiedad donde se encontraban las casas de varios miembros de una misma familia, entre estas, las viviendas de las víctimas y la del acusado.
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“Durante la etapa de juicio, la prueba aportada por el despacho acreditó que el imputado aprovechó la cercanía y el parentesco con las víctimas, para cometer las agresiones sexuales. Para ese momento, una de las ofendidas tenía ocho años y la otra trece años”, informó el Ministerio Público.
Fue hasta el 2017 que una de las menores les comentó a sus papás sobre lo ocurrido, por lo que procedieron a interponer la denuncia.
“Durante el desarrollo de la investigación, en el 2019, la segunda ofendida también contó sobre las agresiones que sufrió, por lo que ambos casos se acumularon a la causa”.
