Cabellos y tejidos de los cuerpos de los ciclistas que murieron la madrugada del 29 enero del 2017, a consecuencia de un fatal atropello, quedaron pegados en el carro Ford Mustang, modelo 2015, del acusado de apellidos Mora Monge, quien de esa forma culminó una noche muy acelerada.
Gustavo Trejos, uno de los agentes del OIJ que formó parte de la sección Especializada de tránsito que efectuó la investigación reveló varios detalles sobre la fatalidad ocurrida frente al Walmart de Curridabat. Las víctimas fueron Mario Enrique Retana Pérez, Lenin Manrique Ortiz Quesada, Pablo Enrique Alcócer Alcócer y Lucía Mata Durán.
Los primeros tres murieron en el lugar, mientras que Lucía luchó por su vida dos meses en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Calderón Guardia y falleció el 21 de marzo del 2017.
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El oficial detalló que recolectaron cinco videos de antes y después del accidente de tránsito, pagos por medio del dispositivo quick pass en los peajes de la ruta 27, analizaron las llamadas salidas del celular del acusado y además obtuvieron una factura. Todos estos elementos vinculan a Mora Monge como responsable del fatal percance.
Además, recibieron llamadas que les decían que el vehículo, golpeado, estaba en las afueras de una casa. Detalló el investigador que cuando llegaron a la vivienda el carruo ya estaba guardado en la cochera.
“El carro estaba mojado, como si lo hubiesen recién lavado y aún así se recolectaron los cabellos y otros elementos pilosos que coincidían con el ADN de los ciclistas”, expresó el oficial.
El último recorrido
El investigador dijo que las radiobases telefónicas, así como los videos permitieron trazar la ruta que Mora hizo en su último recorrido antes de que ocurriera el mortal accidente.
Aseguró que Mora estuvo en una fiesta en el bar Monteverde en Turrúcares, luego pasó por los peajes de la ruta 27, siguió por la avenida 10, por Matute Gómez en San José centro, llegó hasta el bar Panterito que está en Plaza González Víquez, donde estuvo unos minutos y luego continúo hacia Zapote donde dio algunas vueltas.
Cuando pasaba por Matute Gómez un taxista vio pasar al Mustang y luego lo vio en Zapote. El taxista les dijo a los investigadores que es apasionado de estos carros y no se veían siempre, por lo que pudo identificarlo. “En los videos se logra ver pasar al Mustang y el taxi, por lo que coincidía la versión”, dijo Trejos.
En este sector la radiobase detectó que del teléfono de Mora hicieron una llamada a un colombiano que ofrece servicios sexuales.
Mediante otro video de un centro comercial en Curridabat se ve cuando pasan los ciclistas y luego el carro Mustang a alta velocidad, también las cámaras de seguridad de la entrada del Walmart, que está sobre carretera vieja de Tres Ríos grabaron cuando pasan los deportistas y atrás se ve el automotor, detalló el investigador.
Trejos agregó que otra cámara que está en una casa captó cuando los ciclistas fueron golpeados de manera violenta por el carro, la imagen es en blanco y negro, en esta se ve un resplandor de las luces del carro y las bicis cuando rebotaron.
“Seguimos haciendo la ruta y en el centro comercial que queda cerca de la casa del sospechoso, se decomisaron los videos de seguridad y se observa cuando el Mustang iba muy despacio e ingresó donde vive el sospechoso, donde posteriormente los compañeros del OIJ decomisaron el carro involucrado”, mencionó Trejos.
“Las entrevistas que se hicieron en el bar revelan que todos conocían al sospechoso porque dijeron que en diciembre del 2016 pagaron una fiesta. También expresaron que ese día (del accidente) él (Mora) estuvo tomando”, dijo Trejos.
Un ingeniero de imagen y sonido que determinó la velocidad en la que iba el vehículo dijo que viajaba a 102 kilómetros por hora, cuando lo permitido en la zona es de 40 kilómetros. Finalmente las piezas que quedaron tiradas en la calle coincidían con el Mustang.
En este debate Mora Monge es acusado por un homicidio culposo por la muerte de Lucía Mata, debido a que las familias de los tres ciclistas llegaron a una conciliación económica con el sospechoso.