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La vida del joven policía penitenciario José Andrés Madrigal Pérez, de 27 años, llegó a su fin de forma trágica la madrugada de este domingo, pues fue asesinado a balazos en las afueras de un bar en Lepanto de Puntarenas.
Aunque las autoridades aún no han brindado una versión oficial sobre lo sucedido, de forma extraoficial se habla de que Madrigal habría sido asesinado por otro sujeto por un supuesto lío pasional, pero esto no ha sido confirmado.
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De acuerdo con el reporte brindado por la Cruz Roja, el homicidio del oficial ocurrió a eso de las 2:19 a.m. de este domingo en la comunidad de Cabo Blanco de Lepanto, al frente del bar Macondo. Madrigal era vecino de esa misma localidad.
En cuanto al ataque, de momento lo único que se sabe es que José Andrés habría sido interceptado por otro sujeto, quien le habría disparado en dos ocasiones antes de darse a la fuga.
También trascendió, de forma preliminar, que con la ayuda de testigos la Fuerza Pública habría encontrado al sospechoso del ataque y este al ser descubierto habría tratado de quitarse la vida, pero no tuvo éxito. Al parecer, se trataría de un joven de 26 años, oriundo de San Carlos, que fue llevado al hospital de Nicoya con custodia policial.
Tras la trágica muerte de Madrigal, la Unión Nacional de Policías publicó un sentido mensaje en Facebook para despedirse del uniformado.
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“La Unión Nacional de Policías lamenta profundamente el trágico asesinato de nuestro compañero de la Policía Penitenciaria José Andrés Madrigal Pérez, quien laboraba en el Centro de Atención Integral Terrazas, Escuadra A.
“José Andrés fue un servidor comprometido y entregado a su labor, y su partida nos llena de tristeza y consternación. Su pérdida es irreparable, y deja un vacío inmenso en la familia penitenciaria y en quienes lo conocieron y apreciaron”.
