Una familia de San Gabriel de Aserrí pasó la mañana de este viernes por un susto que jamás olvidará: los bomberos encontraron en el patio de la casa un nido de 23 culebras bécquer.
La situación, que parecía sacada de una película de terror, comenzó cuando la señora de la casa vio pasar a una culebra grande (de dos metros y medio) y sintió que era necesario llamar a los bomberos para que le ayudaran con el animal.
El bombero Dani Rivera, quien fue hasta el sitio, pensó que se trataba de uno de esos casos en los que una culebrilla le quita la paz a la gente, pero no. Cuando revisó el patio, donde había muchas latas, se dio cuenta de que la serpiente grande estaba acompañada no de dos ni de cuatro, sino de 23 crías, que estaban hechas un molote. Era una linda familia.
“No esperábamos que fueran tantas”, explicó Rivera, aún asombrado por el número de animales.
El bombero dijo que recogerlas fue algo realmente sencillo ya que las crías eran pequeñas y no dieron mucha guerra. La madre sí fue un poco más arisca, pero no hubo ningún animal o persona heridos durante la captura.
Según explicó Rodolfo Vargas, un experto en serpientes (herpetólogo), las bécquer son de las boas más comunes en el país. Pueden llegar a medir hasta tres metros, pero no representan un peligro para la personas porque no son venenosas y se alimentan de ratas.
“Es común que entre abril y junio se vean más, principalmente porque es el momento del año cuando se dedican a parir”, explicó Vargas.
Momentos después de la captura, las pequeñas y su madre fueron liberadas en una zona montañosa a 20 kilómetros del patio donde estaban tan cómodas en su nido.
Rodolfo hace un llamado para que nadie ataque a los animales en estos casos y pide que se pongan en contacto lo antes posible con el Cuerpo de Bomberos, que sí saben cómo manejar estas situaciones.
En el año 2016 Bomberos atendió 2.857 incidentes por serpientes, mientras que en el 2017 lleva atendidos 998.