Este lunes 3 de agosto inicia un juicio, en los Tribunales de San Ramón de Alajuela, contra un supuesto grupo narco señalado como el responsable de matar al colombiano Diego Fernando García Lemus, de 42 años.
La organización, conformada por cinco hombres de apellidos Londoño Mejía, Hurtado Vargas, Arencio Muñoz, Lewin Ramírez y Zúñiga Quirós y una mujer apellidada Flores Guevara es investigada por secuestro y homicidio, además, por tener laboratorios hidropónicos de marihuana.
De acuerdo con las autoridades, esta banda habría secuestrado al colombiano el 26 de abril del 2018, cuando lo sacaron a la fuerza de su propia casa en Montelimar, en Goicoechea.
Lo mantuvieron retenido durante dos días y durante ese tiempo hicieron llamadas extorsivas a sus familiares hasta Cali, Colombia, exigiendo un rescate de $2 millones (unos ¢1.200 millones), la familia de Lemus pagó $14 mil, unos ¢8 millones, pero siempre lo mataron.
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Al tercer día del rapto, el sábado 28 de abril del 2018, García apareció decapitado en el cruce de Esparza, Cambronero y San Ramón, en el lugar conocido como las tres vías. La cabeza la dejaron cerca del cuerpo.
Las autoridades judiciales detuvieron a los sospechosos el 21 de noviembre del 2018, mediante varios allanamientos y detallaron que García era parte de la banda y fue traicionado, sin embargo, las razones no trascendieron.
El colombiano era oriundo de Cali y llevaba 10 años en Costa Rica, vivía solo y contaba con la residencia costarricense.
Al parecer se dedicaba a vender ropa y tenía vínculos laborales con un taller mecánico en Alajuela, no obstante, las autoridades también lo relacionan como integrante de la banda.
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