El ingeniero de apellidos Morales Vega, de 25 años y su mamá de apellidos Vega Aguirre, de 45, sospechosos de secuestro y de la desaparición de un extranjero llegaron este miércoles en la tarde a suelo tico.
Mientras que para la noche de este mismo miércoles se espera la llegada de la novia del ingeniero, de apellidos Solís Chaves y de 24 años, todos ingresaron por el aeropuerto Juan Santamaría, Alajuela.
Estas tres personas son parte de los sospechosos de la desaparición del comerciante estadounidense William Sean Creighton Kopko, conocido como Tony, de quien se desconoce su paradero desde setiembre del 2018.
La Oficina de Asesoría Técnica y Relaciones Internacionales del Ministerio Público confirmó la llegada y en las próximas horas les estarían haciendo una audiencia por este caso.
A los tres los detuvieron el viernes 11 de enero anterior en España y desde ese momento las autoridades ticas comenzaron la extradicción, junto a ellos llegaron las evidencias que les decomisaron: €4.000 (casi ¢3 millones) en efectivo, tarjetas utilizadas para transacciones de moneda virtual, un libro de contabilidad y dispositivos electrónicos.
Las autoridades ticas afirman que el ingeniero fue la cabeza de la organización, pues descubrió que el extranjero tiene una casa de apuestas electrónicas (sportsbook) en Costa Rica llamada 5Dimes, la cual funciona con la moneda llamada bitcoin.
Los demás sospechosos de la desaparición son la abuelita del ingeniero, de apellidos Aguirre Leal y de 71 años; el tío identificado como Vega Aguirre; así como a dos hombres apellidados Martinez Chacón y Ford Dowman, y una mujer Sanabria Abarca.
Además de ellos, dos imputados de apellidos Sánchez Gamboa y Rivera Masís tienen como medidas cautelares firmar una vez al mes, mantener un domicilio fijo, impedimento de salida del país y no comunicarse con ninguno de los otros investigados por este caso.
A dos tráficos de apellidos Jirón López y Medrano Vargas, les impusieron las mismas medidas cautelares, además de entregar su pasaporte.