Una muerte confusa rodea a la familia de Brandon Enrique Castro Vargas, de 30 años, quien fue hallado con múltiples heridas y sin vida en una finca para la que trabajaba en San Rafael de Dota.
Castro era un joven papá de dos niños, uno de 6 años y otro recién nacido de 3 meses.
A él lo encontraron sin vida este martes 9 de mayo, a las 3:14 p.m. en la finca Carlos Badilla Umaña en San Rafael de Dota, camino a San Pedro.
De acuerdo con el OIJ, la Cruz Roja les confirmó que las lesiones que tenía el cuerpo son desgarres similares al ataque de un perro; sin embargo, a la hora del levantamiento del cuerpo las autoridades judiciales le notaron una lesión profunda en un brazo con corte de piel recto, que podría tratarse de la acción de un cuchillo.
Ante está situación las autoridades no han establecido si la víctima murió por un ataque de manada de perros, una agresión con cuchillo o incluso hasta el ataque de un pizote que dejan lesiones similares a las de un corte de machete.
“Cabe destacar que en la finca hay varios perros; sin embargo, cuando las autoridades llegaron, los mismos estaban en encierros; será la investigación la que determine lo sucedido en el lugar”, señalaron en la oficina de prensa del OIJ.
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Brandon tenía dos días de trabajar en la finca y sus patronos lo vieron llegar, pero no volvió a salir, debía irse al mediodía del martes, situación que les extrañó y lo fueron a buscar.
A él lo encontraron fallecido debajo de unas matas de café, con las ropas rasgadas y muchas heridas en diferentes partes del cuerpo.