Un niño de 11 años era -supuestamente- víctima de un primo de 40 años que lo abusaba sexualmente y al parecer la mamá del menor recibía dinero a cambio de permitir que el hombre abusara de su propio hijo.
Las agresiones sexuales fueron grabadas y guardadas en un archivo en internet que tenía el sujeto de apellido Picay.
Justamente estas imágenes fueron las que permitieron descubrir la agresión contra el inocente, luego de que las autoridades recibieran la alerta de la existencia de este material.
Erick Lewis, jefe de Cibercrimen del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), señaló que la investigación nació hace dos semanas.
“Logramos identificar que una persona almacenaba material de abuso sexual infantil en internet, por medio de la nube; se logró identificar al menor con una investigación informática”, dijo Lewis.
Ante esta situación, los investigadores allanaron la mañana de este jueves una casa en San Felipe de Alajuelita, donde detuvieron al monstruo, quien al parecer es familiar del pequeño, primo del papá del menor.
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Lewis señaló que, de momento, desconocen si Picay reenviaba estas imágenes a otras personas.
“Con el análisis forense de los dispositivos móviles vamos a poder determinar si el sujeto los difundía (los videos) a otras personas”, señaló.
Este hombre es sospechoso de los delitos de violación y abuso sexual, así como producción y reproducción de pornografía Infantil así como tenencia de material pornográfico.
Trascendió que cuando las autoridades llegaron a la vivienda de Picay él estaba junto al menor.
La mamá del niño es investigada por supuestamente recibir dinero a cambio de permitir las atrocidades que sufría su hijo.
El pequeño quedará en manos del Patronato Nacional de la Infancia (Pani).