Escuchar
Rosibel Picado Montes, de 33 años, será recordada por sus amigos y familiares como una mujer alegre, amorosa, enamorada de Dios y una gran amiga.
Ella es la quinta víctima de femicidio en el país, en lo que va del año.
El esposo de la mujer, de apellidos Novoa Porras de 48 años, fue detenido como sospechoso del crimen. El caso ocurrió este viernes 13 de mayo a las tres de la madrugada, en el barrio La Gran Samaria, en La Aurora de Heredia.
La Policía informó que el hombre, después de agredir a su mujer, fue quien pidió ayuda al 911 pues ella se encontraba herida.
Los familiares del sospechoso también escucharon los gritos de Picado que pedía ayuda, sin embargo, cuando entraron al cuarto ya todo había pasado. Uno de los hermanos de Novoa también dio aviso a las autoridades.
LEA MÁS: Joven mamá rechazó una rosas y dos días después la asesinaron a balazos
Cuando los cruzrojistas llegaron la mujer había fallecido. Los oficiales de la Fuerza Pública se encargaron de detener de inmediato al hombre.
El OIJ detalló esta mañana que hubo una discusión entre la pareja dentro de una habitación y que, en determinado momento, el agresor tomó un cuchillo y le propinó heridas en la cabeza, el pecho, la espalda, los brazos y las piernas a su esposa.
Según trascendió, Picado también fue asfixiada, sin embargo, eso será determinado en la autopsia.
Algunos allegados comentaron que Rossy, como le decían de cariño, no tenía ninguna medida de protección y tampoco había denunciado ser víctima de violencia doméstica.
Este era el segundo matrimonio de Picado y el próximo 24 de junio, cumplía ocho años de matrimonio con Novoa.
El esposo quedó en manos del Juzgado Penal de Heredia y se espera que en las próximas horas soliciten prisión preventiva en su contra.
“El despertar de hoy fue terrible, vi en las noticias que mataron a una mujer en Heredia, en eso reconocí la casa de mi amiga Rossy, pero me quedé incrédula, pasaron algunos minutos y fue cuando empezaron a entrar mensajes por WhatsApp y yo sencillamente sentí como un balde de agua fría encima mío yo no podía creer lo que estaban diciendo”, dijo una amiga de la mujer, quien pidió no ser identificada por respeto a la familia ya que no había conversado con ellos.
La amiga aseguró que la víctima era una mujer llena de luz, alegre, que siempre estaba para sus amigos y otras personas cercanas.
“Sinceramente como dicen nadie sabe la cruz que una persona puede estar cargando dentro de las paredes de su casa, porque ella nunca me dijo que fuera víctima de violencia o que tuviera temor a su esposo, ellos siempre salían juntos a pasear, ella podía hablar y estar con sus amigos y familiares, no eran de vicios. Además eran una pareja que tenía a Dios en su vida, por lo menos ella, él la seguía. No existe razón alguna para que una mujer sea asesinada y muchos menos una persona como ella, él no era violento o por lo menos yo no le conocí esa parte nunca, me siento destrozada.
“Claro que la gente ahora quiere justicia por ella, pero ya no la tenemos con nosotros, era una mujer que estaba empezando a vivir, que deseaba cumplir sueños y que era amada y respetada por todos. Es doloroso que estas situaciones sigan pasando y que la vida de tantas familias cambie de un momento a otro, es que nos dejaron con el alma despedazada, no hay una explicación para tanta violencia”.
Rossy era oriunda de Parrita.
Otras cuatro mujeres además de Rosibel han sido asesinadas este año, el 3 de marzo en Tamarindo de Santa Cruz, María Fernanda Quesada Gutiérrez de 28 años, quien recibió dos puñaladas, su esposo de apellido Rovira es el sospechoso.
El 11 de enero en Jardines 2 de San Rafael de Heredia, fue asesinada Annette Benavides Chacón de 40 años, ella fue apuñalada por su compañero sentimental de apellido Rubí, quien se encontraba en estado de ebriedad.
El 5 de enero fue asesinada en la ciudadela León XIII en Tibás, Oriana Salguero Vega por un hombre de apellido Grant Villafranca, que era su pareja.
Además, el 17 de enero en San Isidro de Heredia hubo otro caso, pero las autoridades no dieron mayores detalles. Los dos últimos casos los están analizando para tipificarlos como femicidios.
