Quienes secuestraron y acabaron con la vida del estadounidense William Sean Creighton, de 43 años, escondieron su cuerpo en una tumba del cementerio de Quepos.
Así lo confirmó el OIJ, que informó además que un grupo de investigadores halló el cadáver la primera semana de setiembre, pero no lo hizo oficial hasta confirmar que se trataba del extranjero.
Creighton, quien era dueño de una casa de apuestas en línea ubicada en San Pedro de Montes de Oca, fue secuestrado el 24 de setiembre del 2018, cuando fue interceptado por varios sujetos, entre ellos dos tráficos, mientras viajaba en su lujoso carro por Granadilla de Curridabat.
En cuanto al hallazgo del cuerpo, la Policía Judicial indicó que logró llegarle gracias a una informe confidencial recibido.
Los investigadores realizaron la búsqueda dentro del camposanto y confirmaron que estaba en un nicho sin placa.
Prueba dental confirmó
La oficina de prensa del OIJ confirmó que fue por medio de pruebas dentales que se determinó que, en efecto, se trataba del extranjero secuestrado; además indicó que hasta el momento no se ha determinado la causa de muerte.
La noticia sobre el homicidio de Creighton, quien también era conocido como “Tony”, también ha sido confirmada por varios medios estadounidenses.
“Podemos confirmar que las autoridades costarricenses identificaron los restos de un ciudadano estadounidense”, dijo un portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos a la cadena deportiva ESPN.
El OIJ confirmó que el caso se trataba de un secuestro luego de que los familiares del extranjero recibieron una llamada de los maleantes pidiendo $5 millones por la liberación del hombre; al final solo se pagó un rescate de $1 millón en bitcoins (moneda virtual).
En enero de este año, las autoridades realizaron operativos en Costa Rica y en España para detener a los sospechosos del secuestro. El supuesto líder es un ingeniero de apellidos Morales Vega y 25 años.
Entre los sospechosos también están la mamá y la novia de Morales, dos tráficos y siete hombres más. Todos cumplen con medidas cautelares.
El Ministerio Público aún no ha dado a conocer si modificara los cargos del caso para que los sospechosos también sean investigados por homicidio.