El fiscal Hans De la O murió haciendo lo que más le apasionaba. Siempre que tenía la oportunidad les decía a sus conocidos que le encantaba el trabajo, pese a los riesgos que eso implicaba.
José Blanco era vecino y amigo del funcionario judicial y contó que hace algún tiempo había tenido una conversación con De la O sobre lo peligroso de su trabajo.
“Hace años Hans fue fiscal de Tránsito allá en Heredia y luego se convirtió en fiscal de Flagrancia. Un día me lo encontré en la calle y le pregunté si no le daba miedo que alguno de los maleantes que él acusaba se vengara o algo así y me dijo que a él lo apasionaba el trabajo que tenía y que si algún día le pasaba algo, al menos era por hacer lo que tanto amaba”, contó Blanco.
Nelly Gómez, otra de las vecinas de la víctima, dijo que él toda la vida vivió en el barrio La Danesa, en Calle Fallas de Desamparados y era una persona muy atenta y preocupada por el bienestar de la mamá.
“Hans se crió aquí y siempre fue muy simpático, él a veces llegaba a mi casa a saludarme porque yo soy muy amiga de la mamá que se llama doña Elvia. Hoy en la mañana (jueves) me levanté antes de las 5 de la mañana para ir a caminar y fue cuando me di cuenta de lo que había pasado.
“Vi unas patrullas y fui a ver a la mamá de Hans y me dijo que se sentía muy mal porque ella sentía que no iba a aguantar tanto dolor, de hecho la tenían en la casa de una vecina porque ella decía que no quería entrar a la casa en la que vivía con Hans”, relató.
Gómez dijo que doña Elvia tiene 78 años y padece de diabetes y presión alta, por lo que los paramédicos de la Cruz Roja tuvieron que llegar a estabilizarla después de semejante impresión como fue ver a su hijo mortalmente herido.
Vecinos corrieron a ayudar
William Mora vive a unos 50 metros de la casa del funcionario judicial y escuchó los balazos.
“Fue muy raro, yo escuché algo, pero no eran balazos como los que uno ha escuchado antes, sino que se oían como soplos fuertes, por eso creemos que usaron silenciadores.
“Eso fue a la medianoche y un vecino, que todavía no se había dormido, se asomó por la ventana cuando oyó el estruendo y vio un pick up oscuro huir. Después de eso corrió a la casa de Hans y cuando llegó él todavía estaba vivo y le extendía la mano como para pedir ayuda”, aseguró el lugareño.
La mañana de este jueves toda la calle que está frente a la casa del fallecido estuvo cerrada ya que los agentes del Organismo Judicial (OIJ) estuvieron revisando detalladamente el lugar en busca de evidencias que permitan dar con los asesinos.
Los lugareños esperan que el caso se aclare pronto y que las autoridades arresten a los responsables de la muerte del querido vecino para que se haga justicia.