La familia del ingeniero agrónomo Daniel Salas Mosquera, de 46 años, presentará una denuncia penal contra el parque de aguas termales Kalambú, en La Fortuna, por el trágico hecho que terminó por costarle la vida a Salas.
Así lo confirmó a La Teja Rafael Ángel Guillén, abogado que representa a la familia de Daniel, quien explicó que este mismo miércoles se encargará de presentar los respectivos documentos ante la Fiscalía de La Fortuna.
“Lo que estamos haciendo es apersonarnos como víctimas ante el Ministerio Público, que ya inició la investigación de oficio desde el primer día, pero nos vamos a constituir en parte, eso es lo que vamos a hacer hoy, ahora estamos firmando toda la documentación y de aquí salgo para La Fortuna a entregar esos documentos y a hacer unas averiguaciones que necesitamos para el proceso”, indicó Guillén.
El abogado fue claro al decir que la familia del ingeniero no tienen ningún interés en recibir una indemnización millonaria por lo sucedido, pues lo que buscan es marcar un precedente para que no vuelva a ocurrir un caso como este.
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“Nos vamos a convertir en querellantes y en actores civiles, la pretensión no es el dinero, pero sí sentar un precedente para que los turistas tengan la seguridad de que cuando van a un centro de recreación no va a haber ningún inconveniente, eso es lo que queremos hacer”, explicó.
Ante una consulta hecha por La Teja, el Ministerio Público confirmó que se encuentran investigando lo sucedido en torno a la muerte de Salas.
“La Fiscalía de La Fortuna indicó que se encuentra trabajando en dirección funcional con el Organismo de Investigación Judicial de la zona, labor que pretende recabar datos e indicios relevantes que serán analizados y valorados, con la finalidad de determinar si existen elementos probatorios suficientes para la apertura de una investigación penal”.
Daniel murió el sábado 17 de diciembre en el Hospital de San Carlos, luego de que la balsa en la que iba junto a su pareja y cuatro menores, dos hijos de él, cayera de 6 metros de altura debido a que una parte del tobogán porque el que se deslizaban cedió.
La pareja de Daniel y los menores también sufrieron golpes pero sobrevivieron al incidente.