El volcán Turrialba, que ha demostrado ser uno de los colosos más activos del país, seguirá con su comportamiento chúcaro por un largo tiempo, pues, según un experto en el tema, pasarán varios años para que este se quede “dormido”.
Este coloso demostró estar bien despierto la noche del pasado martes 17 de enero, cuando entró en erupción en dos ocasiones y lanzó una columna de ceniza de más de mil metros sobre el nivel del cráter. Las autoridades informaron que esta fue la erupción más grande de los últimos cuatro años.
Javier Pacheco, investigador del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori), explicó que es muy posible que continuemos viendo este tipo de erupciones por unos cuatro años más, pues ese podría ser el tiempo que le tomaría al volcán quedarse dormido.
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“Eso sí, va a tardar algunos años en caer completamente (la actividad) y que el volcán entre en una fase de estado dormido, como lo están el Irazú y el Arenal, pero sí va a tardar algunos años, porque la roca caliente tarda muchos años en enfriarse porque es un mal conductor del calor y no hay manera de enfriarla más rápido”, detalló.
Magma lo puso activo
Pacheco explicó que las erupciones de este macizo están relacionadas con una situación que inició en el año 2000, cuando se descubrió que una gran cantidad de magma se posicionó debajo del volcán.
“Lo que pasó es que entre el año 2000 y el 2016 hubo un emplazamiento de un cuerpo magmático debajo del volcán a una profundidad bastante superficial.
“La mayoría de ese cuerpo magmático aún esta ahí, se está enfriando y desgasificando, poco a poco va perdiendo la energía conforme se va cristalizando el magma”, señaló.
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Según el Ovsicori, ese proceso de enfriamiento del magma causa que los gases que se acumulen dentro de las grietas superficiales se rompan cuando la presión es demasiado alta, esto ocasiona explosiones y la salida de fragmentos de rocas y ceniza.
“A ciencia cierta no sabemos cuánto puede durar esto, porque desde que terminaron las erupciones fuertes en el 2016 se siguieron registrando explosiones del tipo estromboliana (erupción volcánica explosiva que alterna periodos de gran actividad con otros de calma) en el 2017 y 2018, ya en el 2019 las erupciones empezaron a mermar”, señaló Pacheco,
Debido a las erupciones registradas la semana pasada, el Ovsicori elevó el nivel de actividad del coloso del 2 que es “volcán activo” a nivel 3 que es “volcán en erupción”.
A raíz de esto, el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) tomó la decisión de cerrar temporalmente el área protegida hasta contar nuevamente con información de los entes técnicos que permita tomar decisiones para su reapertura.