Al exdiputado Abelino Esquivel le salió bien caro el tratar de sacar de prisión a un pastor amigo suyo que fue condenado a 16 años de prisión por violar a una menor de edad.
El Tribunal Penal de Hacienda y la Función Pública condenó a Esquivel a tres años de cárcel y al pago de 6 millones de colones como responsable del delito de Tráfico de Influencias agravado.
Sin embargo, el exdiputado no pondrá ni un solo pie en prisión, pues se le otorgó el beneficio de ejecución condicional de la pena por 3 años, es decir, solo iría a la cárcel si cometiera un nuevo delito en ese lapso.
Además, la Procuraduría de la Ética Pública (PEP) informó que a Esquivel también se le impuso la pena de inhabilitación para desempeñar cualquier empleo, cargo o comisión pública por el plazo de 3 años.
LEA MÁS: Cae banda que drogaba a jovencitas y las explotaba sexualmente
La PEP indicó que la sentencia contra el exdiputado fue dictada el pasado 27 de octubre y en esta también se declaró con lugar la acción civil resarcitoria presentada por dicha entidad.
“El Tribunal declaró con lugar la Acción Civil Resarcitoria iniciada por el Estado, condenando civilmente a Esquivel a pagar al Estado Costarricense la suma de cinco millones de colones por el daño social causado, también deberá cancelar los intereses sobre ese monto desde la fecha de firmeza de la sentencia hasta su efectivo pago, así como un millón de colones por los costos del proceso”.
El caso contra Esquivel inició en marzo del 2018, cuando fue denunciado por Marco Feolí, el entonces ministro de Justicia, por el delito de tráfico de influencias.
El exdiputado le habría pedido al ministro de Justicia que intercediera para que al pastor apellido Barquero se le diera el beneficio de libertad condicional o el sistema semiabierto, alegando que este estaba descontando la pena desde el año 2012 en la cárcel Jorge de Bravo, en Cartago.
Luego de que se dio a conocer la denuncia, Esquivel dijo que se había dado un malentendido, pues el pastor no era amigo suyo y que más bien él estaba ayudando a una ciudadana (esposa de Barquero) para que ella pudiera pedirle a Justicia que revisaran su caso.