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El caso relacionado con la bebita de cuatro meses que murió, al parecer, a manos de sus propios padres tiene una nueva actualización, ya que las autoridades informaron que los sospechosos también son papás de un chiquito de apenas un año y ocho meses.
Así lo confirmó a La Teja la oficina de prensa del Patronato Nacional de la Infancia (PANI), la cual informó que el otro menor fue atendido por la institución, una vez que se dio a conocer el presunto caso de agresión contra su hermanita.
“El Departamento de Atención Inmediata, que es el servicio de emergencias 24/7, atendió ayer el incidente y se ubicó al niño de un año y ocho meses con un recurso familiar”, detalló el PANI.
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Este caso, que ha conmocionado a todo el país, llegó a conocimiento de las autoridades a eso de las 2:15 p.m., de este domingo 14 de julio, cuando los sospechosos, un hombre apellidado Solano, de 23 años y una mujer de apellido Jarquín, de 20; llegaron a la clínica Marcial Fallas, en Desamparados, con su bebita de cuatro meses.
“La menor de edad de cuatro meses había ingresado a este centro médico con aparentes signos de violencia por síndrome de niño agredido, donde fue declarada fallecida minutos después”, detalló el OIJ.
Extraoficialmente, trascendió una versión que señala que los padres de la bebé llegaron en un carro particular hasta el centro médico y que, al parecer, ambos se encontraban bajo los efectos de alguna sustancia, sin embargo, esto último no fue confirmado por las autoridades.
La pareja fue detenida y se puso a la orden del Ministerio Público, donde se determinará si se abre una causa en su contra por las supuestas agresiones que le habrían costado la vida a la chiquita.
