La familia de Jaikel Campos Vargas, de 31 años, ha vivido momentos de mucho dolor desde hace dos semanas este joven pescador desapareció en el mar en Guanacaste, a causa del fuerte temporal que azotaba el país.
La hermana de Jaikel, María Campos, nos contó que lo han buscado incansablemente desde ese día, sin embargo, este jueves la familia, amigos y algunos vecinos realizaron un acto de despedida en la playa Marbella, en Santa Cruz de Guanacaste.
LEA MÁS: Niño arrastrado por río en Limón había pedido un regalo de Navidad para ser como Cristiano Ronaldo
“Han pasado 13 días desde que mi hermano desapareció y no hay ningún rastro de él, no logramos encontrar nada, nosotros somos de Chomes, en Puntarenas, y tuvimos que quedarnos todo este tiempo en la playa, los vecinos no nos dejaron solos, nos prestaron una casita para quedarnos, nos dieron ropa y comida y nos apoyaron en la búsqueda”, dijo la hermana.
Los familiares llegaron hasta la playa con flores y realizaron una oración de despedida a Jaikel, pues son una familia muy creyente.
“Nos despedimos de mi hermano, le dijimos que en todo momento hicimos todo lo que pudimos para encontrarlo, y también oramos para que el mar nos lo devuelva, porque nos fuimos, pero no perdemos la fe de que podamos encontrarlo, los vecinos nos dicen que las fuertes corrientes que hay en esta playa son las que no permiten que mi hermano aparezca y que es probable que más bien esté en otro lugar, ellos como son de aquí, sí saben”, dijo la hermana.
Ella asegura que es muy duro y muy doloroso lo que han tenido que vivir y sentir su ausencia al regresar a casa.
“Mi hermano ya era la cuarta vez que venía por estas playas, él amaba pescar y decía que no le importaba morir si era haciendo lo que le gustaba y le hacía feliz, pero la verdad a mi familia y a nosotros los que nos faltó fue apoyo, los guardacostas solo un día nos ayudaron a buscar, y eso que pusimos la denuncia por la desaparición, mientras a mucha gente le sobró ayuda, a nosotros nos faltaron manos, estuvimos solos, pero los vecinos de la playa nos respaldaron, ellos sí nunca nos dejaron solos, un policía nos dijo que dieron la orden de arriba de no ayudar a buscar más”, asegura.
Lo más duro para María es ver a su sobrino de 10 años, hijo de Jaikel, tan triste por la ausencia de su papá.
“Mi sobrino en las noches jugaba con mi hermano, esa era la vida de él, estar con su chiquito, mi hermano lo que más soñaba era comprarle un lotecito y más adelante hacerle una casita a mi sobrino, pero los planes de Dios eran otros, ese chiquito está con una gran tristeza. Mi mamá ha sido muy fuerte, pero ella no pierde la esperanza de poder encontrarlo”, dijo la hermana.
LEA MÁS: Sueño de padrastro que murió con niño por tormenta Sara estaba por cumplirse
Además de la pérdida tan terrible que sufre esta familia, la tormenta Sara destruyó parte de su casa.
“Se nos llevó la parte de atrás y muchas cosas se dañaron, pero eso hasta ahora lo pudimos ver porque la prioridad era buscar a mi hermano, la casa de nosotros y la de mi vecina se afectaron mucho”, agrega.
Esta familia es muy humilde, Jaikel era el segundo de cuatro hermanos, ellos esperan volver otra vez a la playa el 20 de diciembre para colocar una plaquita cerca en su honor.
“Mi hermano era muy bueno con todos nosotros, y lo que yo más le valoraba es que él siempre quería ver a su familia unida, él luchaba por eso”, asegura la hermana.
Campos desapareció cuando se encontraba pescando con un primo en playa Marbella, en Santa Cruz de Guanacaste. Los dos hombres quedaron aislados en una playa rocosa por la crecida de la marea y, en ese momento, Jaikel fue arrastrado por la corriente.
Esta familia necesita apoyo para comprar comida para el hijo de Jaikel y poderle hacer frente a los daños de la lluvia, durante muchos días ellos no pudieron trabajar por estar a la orilla del mar, esperando que el oleaje les devolviera el cuerpo, si usted quiere apoyarlos, puede hacerlo al sinpe móvil: 7251-4369 a nombre de Nayit María Campos Vargas.
Las fuertes lluvias también dejaron dolor para muchas familias, tres personas más están desaparecidas: don Ronald Esquivel, de 56 años, quien fue arrastrado por la crecida de un río en Guanacaste y además una mujer y un hombre, quienes desaparecieron tras caer a los ríos María Aguilar y Torres, respectivamente.
En Guácimo de Limón, Keider Zeledón Cortés, de 9 años, y su padrastro Diego Armando Gipson Alvarado, de 36 años, fueron arrastrados por la corriente del río Jiménez, ambos fallecieron.
La tormenta Sara provocó que casi 2.200 personas tuvieran que ser albergadas.