Una mujer apellidada Chaves Campos fue detenida este jueves 24 de junio por la Policía Profesional de Migración como sospechosa de liderar una banda dedicada a la confección, venta y distribución de documentos falsos.
Chaves le entraba a todo, ya que al parecer falsificaba desde un carné provisional de permiso laboral hasta uno de manipulación de alimentos.
Junto a la supuesta líder también fue capturada una nicaragüense de apellidos Moreno Maradiaga, quien, al parecer, era su mano derecha, ya que las autoridades la señalan como la encargada de distribuir los documentos falsificados en distintos puntos del país.
Las sospechosas fueron detenidas por medio de dos allanamientos realizados en Desamparados de Alajuela y en el distrito central de esa provincia.
“La investigación, que inició en setiembre 2020, estableció que los miembros de la agrupación coordinaban con extranjeros en condición migratoria irregular (eran su fuente principal de ingresos) y les solicitaban sus datos personales, fotografías tamaño pasaporte con fondo blanco y una imagen de la firma impresa en una hoja en blanco para la preparación de las identificaciones y la papelería falsa”, detalló la Policía de Migración.
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Según la investigación, la banda se especializaba en falsificar el carné provisional de permiso laboral para personas refugiadas, licencias de conducir, carné de manipulación de alimentos y títulos de educación básica y de bachiller en educación media.
“La Policía de Migración realizó inspecciones en diferentes empresas, detectando documentos confeccionados por dicha organización. Las extranjeros utilizaban los documentos falsos de forma variada, desde el uso de identificaciones migratorias para evadir a las autoridades, así como obtención de certificaciones de antecedentes penales, apertura de cuentas bancarias, trabajos formales en empresas de la industria alimentaria, entre otros”.
Estos documentos eran elaborados en la casa de Chaves Campos y dependiendo de qué se tratara cobraba montos que iban desde los ¢25 mil hasta los ¢60 mil.
Chaves y Moreno serán investigadas por los delitos de falsificación de documentos públicos y auténticos, por lo que se exponen a una condena de hasta seis años de cárcel.