Los tres casos que se dieron de violencia intrafamiliar la mañana de este lunes en Escazú, La Unión de Cartago y Upala de Alajuela tienen en jaque a las autoridades del INAMU pues todos los días reciben denuncias por este tipo de casos.
En Bebedero de Escazú un hombre le pegó 15 puñaladas a su compañera frente a los hijos de ambos. Flor Mena tenía medidas de protección pero había recibido al hombre el pasado domingo para celebrar el Día del Padre. Ella está hospitalizada en condición estable.
En Nazareth de Upala un conocido montador de toros atacó a su mujer de un filazo y al creerla muerta se suicidó.
Mientras que en San Vicente de San Rafael de La Unión, aparentemente una mujer cortó con un cuchillo al hombre, quien la golpeó en la cara y ella se cortó en el estómago. Los dos fueron llevados fuera de peligro al Hospital Max Peralta. La chiquita de ocho años vio todo lo ocurrido.
La abogada Adina Castro, del área de violencia del Inamu, asegura que en ocasiones las festividades pueden provocar el aumento de violencia doméstica, sin embargo, asegura que cuando estos casos se dan es porque ya hay un antecedente de que es una situación que se ha estado dando de a poquitos.
"La violencia es cíclica. Después de un período de explosión, gritos, golpes, ataques con arma viene un período de calma sobre todo cuando se da la separación. El agresor entra en un estado en que empieza a decirle a la víctima que se le fue la mano, que no debió y así logra retomar el control diciendo que actuó sin intención", explicó la abogada.
Según la experta, los agresores nunca están en capacidad asumir por completo sus culpas o responsabilidades por lo que empiezan a hacer creer a la víctima que ella tiene en parte culpa por lo que ocurrió.
"Ese período de calma en que el agresor baja, puede durar meses, días o hasta horas (como en el caso de Escazú que el domingo todos estuvieron felices y este lunes en la mañana se dio la agresión). A veces el miedo de la víctima a decir que no es lo que provoca que se dé una nueva agresión, es importante hacer respetar las medidas de protección y que la afectada si cree que no van a ser respetadas converse con nosotros para analizar otras opciones, hay además que tener en casa un plan de seguridad personal", insistió Adina.
Rosey López, del área de Violencia de Género del INAMU, aseguró que la violencia en casa empieza cuando la mujer tiene miedo, no puede salir, vestirse como se siente bien, opinar, hasta hablar por teléfono. Cuando la mujer ve esas señales debe empezar a analizar su situación para evitar una agresión física a futuro.
La Policía atiende hasta 10 casos de violencia intrafamiliar al día, al año detienen 3896 agresores.
"La mujer debe tener un plan de seguridad personal en su casa para saber qué hacer si el hombre la va atacar, esto sobre todo cuando ya tiene medidas de protección", dijo Adina Castro, abogada del INAMU
Al menos 10 casos de violencia intrafamiliar al día atiende la policía.