Los delincuentes se están aprovechando de la pandemia para cometer más asaltos en autobuses.
Dowglas Rodríguez, subjefe de la Sección de Hurtos del OIJ, explicó que ha habido un aumento de denuncias de este delito desde el 6 de marzo anterior, cuando se reportó el primer caso de coronavirus en suelo tico.
Explicó que muchas personas al subirse a los buses tienen su cabeza en otro lado por culpa de la pandemia, pensando en el aumento de casos o la situación económica, por ejemplo, y por eso ni se fijan en la gente que está cerca. Lo que facilita la labor de los bichos.
“Creemos que la población perdió un poco de interés en la seguridad de sus bienes, ahora anda más preocupada por otras cosas. Las personas se montan en el bus, ven las noticias en el celular (sobre todo lo que está pasando) y nunca ven a las personas que están alrededor, y esto afecta porque las personas que están alrededor ven dónde usted guardó su celular para robarlo”, mencionó.
Las autoridades saben que se trata de un grupo organizado que aborda cualquier autobús, no tiene una ruta determinada. El modo de operar que utilizan es que van en un carro y tres de los bichos se bajan para montarse en cualquier bus y buscar a las víctimas.
Aparte de ver dónde guardó o cómo lleva su celular la víctima para arrebatárselo, están usando un timo que consiste en tirar algún objeto al pasillo justo cuando un pasajero se va a bajar. En ese momento le agarran el pie a la persona y le dicen: ‘Cuidado me maja el medicamento u otro objeto’, entocnes la víctima pierde la atención para no majar nada, pero en ese momento otros dos delincuentes se aprovechan para robarle la billetera o el celular.
El daño en cada uno de los hurtos va desde los ₡500 mil hasta el ₡1 millón.