EscucharCuatro pescadores vieron la muerte de cerca al ser casi ‘atropellados’ por un barco mercante.
Ellos fueron rescatados por el Servicio Nacional de Guardacostas, este 1 de setiembre. Se trata de Diego González, de 35 años, César Rojas, de 46 años, Randy Quirós, de 29 años, todos vecinos de Quepos, y Juan Carlos Blanco, de 45 años, de Chacarita, Puntarenas.
Los cuatro hombres estaban en una embarcación que tenía 12 metros de longitud y es de pesca a pequeña escala, mientras el mercante de nombre Ever Full, es de 470 metros de largo.
Los pescadores ticos señalaron que estaban en la faena de pesca y decidieron tomar un descanso, en su bote Claudia 79, matrícula PG-7702.
Ese descanso casi se convierte en un pasaje mortal, porque estaban en la línea de tránsito del enorme barco mercante.
Cuando el capitán del mercante se percató de que la pequeña embarcación estaba en su rumbo, ya era muy tarde para poder detener por completo el buque, por lo que era muy poco lo que este podía hacer para evitar el impacto. Incluso, después de bajar por completo la velocidad, el mercante recorrió casi seis kilómetros para poder dar la vuelta y salvar a los tripulantes de la embarcación impactada.
Este tremendo susto ocurrió a 73 kilómetros de Cabo Matapalo, de Golfito, Osa, Pacífico sur.
Cuando se devolvieron al lugar del impacto, el buque alertó al Servicio Nacional de Guardacostas de los hechos, dando parte de que todos los náufragos estaban en buen estado de salud.
Sin radar
Según el capitán de la lancha, ellos no se percataron de la presencia del buque pues no tenían ningún tipo de radar o algún otro medio que los alertara de su presencia.
Afortunadamente una embarcación interceptora del Servicio Nacional de Guardacostas, la cual realizaba un patrullaje preventivo por la zona, permitió efectuar una rápida acción humanitaria de rescate acuático al ser las 4:56 de la tarde del jueves anterior.
LEA MÁS: Pescador sobrevivió 57 horas en el mar tras vuelco de lancha y pide que rescaten a su amigo
Los guardacostas llevaron a los náufragos hasta el muelle del Instituto Nacional de Cooperativismo (INCOOP) en Golfito, Puntarenas.
La Cruz Roja indicó que ningún pescador requirió de atención médica.
La embarcación de pesca Claudia 79 quedó hundida en un 90%, lo que imposibilitó su remolque hasta tierra.
