La tica Stephany Gradys Artola, de 27 años, cumplió uno de los sueños más grandes que tenía al cantar en el coro de la reconocida iglesia de La Sagrada Familia en Barcelona, España, sin embargo, una tragedia silenció la hermosa voz de esta joven.

Gradys, quien tenía cuatro años de vivir en España, falleció este sábado, aparentemente, de una intoxicación con comida mientras cenaba con su esposo y varios allegados.

Arturo Barquero, cuñado de Stephany, dice que todo a punta a que la joven perdió la vida por ser alérgica a algún tipo de sustancia o alimento que ingirió, sin embargo, que será hasta este lunes que los forenses de Barcelona determinen la causa de muerte.

Según trascendió los cuerpos de emergencia tardaron más de 20 minutos en llegar hasta la casa de Gradys, pues está alejada del centro de Barcelona y hubo complicaciones por las actividades religiosas que se celebraban.

“Stephany fue una persona muy tranquila, serena, con objetivos muy claros en la vida, que siempre trazaba metas y las lograba, nunca le conocí una meta que no lograra cumplir”, añadió.

Necesitan ayuda

Barquero comentó que la familia de Stephany necesita de mucha ayuda pues su mamá y sus dos hermanas necesitan viajar lo antes posible a Barcelona, sin embargo, no cuentan con los recursos económicos para hacerle frente a esta situación.

“Se ha hecho todo lo posible con la embajada de Costa Rica en España, sin embargo, el Gobierno no cuenta con los recursos para traer el cuerpo y esto se complica ahora más por el viaje de ellas”.

El cuñado contó que repatriar el cuerpo de Gradys costaría a la familia aproximadamente €9.000 (cerca ¢6,2 millones), dinero con el que no cuentan en este momento. La otra opción sería cremarla, pero esto cuesta cerca de €4.500 (¢3,1 millones).

La familia de la cantante está pidiendo toda la ayuda posible pues lo único que desean es traer de regreso a Stephany y darle la despedida que ella se merece.

Amor la llevó lejos

Arturo dijo que Stephany nunca se imaginó que por perseguir su sueño de cantar allá, llegaría a conocer el amor de su vida, aunque en otro destino.

“Ella conoció a su esposo (español) mientras andaba de paseo en Bocas del Toro, se enamoraron y empezaron una relación, él vino a Costa Rica para seguir con la relación y luego ella hizo su primera visita a España y en la tercera visita se quedó allá, se casaron hace casi dos años”, detalló.

Además de formar parte de este reconocido coro, Gradys también era graduada de la Universidad de Costa Rica en enseñanza especial para niños y según Barquero, a eso se dedicaba en Barcelona.

Apasionada

Barquero dijo que la música y el canto era lo que realmente apasionaba a Stephany, por eso es que antes de viajar a España estuvo durante 10 años sirviendo en el coro de Getsemaní, en la parroquía San Juan Bautista de Tibás, San José.

“Durante muchos años ella cantó para un montón de coros como el de Getsemaní y el de la Universidad Nacional en Heredia, además tuvo muchas oportunidades para salir del país a cantar en varios lugares de los Estados Unidos”, mencionó el joven.

El cuñado finalizó diciendo que esperan recibir suficiente ayuda para que la mamá y las hermanas de Stephany puedan viajar a Barcelona a más tardar este lunes.

“Ella simplemente fue una excelente hermana y amiga, una mujer incansable y es una noticia que nos toma por sorpresa a la familia y a sus amigos”, finalizó.