La muerte se cruzó en el camino del panadero Miguel Araya Paniagua, de 66 años, cuando se encontraba a 125 metros de su negocito.
A las 6:02 de la mañana de ayer, su carrito de trabajo fue embestido por detrás por un camión cargado de madera y que, en apariencia, se quedó sin frenos. El impacto fue tan violento que ambos vehículos avanzaron varios metros, cruzaron una calle, y se estrellaron contra con un camión que transportaba cervezas y que iba pasando, luego los tres vehículos se fueron contra dos pequeños comercios que quedaron destruidos.
Uno era una venta de chances y el otro iba a ser utilizado como verdulería, afortunadamente no había personas dentro.
“Él (don Miguel) venía de repartir pan y haciendo el alto fue cuando ocurrió el accidente”, dijo Ricardo Umaña, cuñado del panadero.
Don Miguel no fue la única víctima mortal, otros dos hombres y una mujer también perdieron la vida al quedar atrapados entre las latas de los dos camiones y el carro.
El fatal accidente ocurrió en Cervantes de Alvarado, Cartago, específicamente en un cruce ubicado al sur de la iglesia católica.
El OIJ identificó a los otros tres fallecidos como José Delfino Cubillo Castrillo, de 60 años y quien manejaba el camión madedero; su acompañante, Leidy Valencia Serrano, de 37 años, y el conductor del camión que transportaba cervezas, Luis Diego Godínez Badilla, de 32 años.
En el camión manejado por Godínez también iba un muchacho de apellidos Castro Barrantes y 20 años que sobrevivió y fue llevado de emergencia al hospital Max Peralta, en Cartago.
“Este muchacho estaba en la calle acompañado de otras personas, no sabemos si ellos lograron sacarlo, si salió solo o si fue expulsado por el mismo impacto. Las estructuras de las cabinas quedaron destruidas, me imagino que por la velocidad del impacto pudo salir expulsado”, dijo Mauricio Mendoza, de la Cruz Roja de Cartago.
Cámaras grabaron tragedia
El terrible choque fue captado por dos cámaras de seguridad de unos locales comerciales.
En los videos se ve que el carro del panadero hacía el alto al momento de ser embestido y empujado hacia adelante.
Varios testigos contaron que el camión de madera parecía ir sin frenos, habría recorrido más de un kilómetros cuesta abajo y fuera de control. Al parecer, había salido de un aserradero cerca de Pacayas.
“Al observar el video uno piensa en algunas posibles causas. En primer lugar podría pensar en una falla mecánica, en una falta de pericia, en un evento de salud del conductor, incluso en un descuido o en una combinación de estas. Por eso es que el Ministerio Público ordena una diligencia para determinar con certeza lo sucedido y de quien sería la responsabilidad”, dijo Alberto Barquero Espinoza, subdirector de la Policía de Tránsito.
Por la tarde circuló en redes sociales un audio en el cual se decía que un menor de edad de 13 años llevaba uno de los carros chocados, pero esa información es falsa.
Dura noticia
Ricardo Umaña Chinchilla, cuñado del panadero, contó que su familia, especialmente su esposa, estaban muy afectados por lo sucedido pues recibieron la noticia de golpe.
“Cuando escuchamos a los bomberos le entró una llamada a mi esposa, pero no sabíamos que se trataba de él. Yo fui a ver el accidente y regresé a la casa para desayunar, mi esposa y yo comentamos que era una situación muy dura para las familias de esas personas sin saber que esas personas éramos nosotros”, contó.
Umaña destacó que Miguel era muy conocido en el pueblo, pues desde la muerte de su suegro, hace 27 años, se encargó de sacar adelante la panadería San Pancracio junto a uno de sus hermanos.
“Como toda persona de pueblo, era buena gente y muy conocido porque él repartía el pan en las mañanas. Lo recuerdo como una persona muy buena, trabajadora y humilde, también que era muy aficionado de la Liga”, detalló Umaña.
La muerte de Araya, quien tiene tres hijos de 22, 24 y 35 años, fue un duro golpe para toda la comunidad de Cervantes ya que era considerado el panadero del pueblo, además de que con su trato y personalidad se habían ganado el cariño de muchos vecinos.
En cuanto a los otros fallecidos, trascendió que el conductor del camión madedero y su acompañante eran de Hojancha de Guanacaste y Godínez vivía en Desamparados.